Tendencia: labios rojos
Marilyn Monroe y Paloma Picasso son las mujeres emblema del look piel pálida con unos intensos labios rojos.
"Antiguamente, éste era el único color disponible para maquillarse; de ahí su vocación de clásico", explica Constanza Martínez, maquilladora formada en París. "Se trata de un color que se asocia con glamour y elegancia. Es el labial de mujeres sensuales, con carácter, seguras de sí mismas, que se atreven a llamar la atención".
La moda ha llevado este atrevimiento hasta límites insospechados. Ahora, el labial rojo se puede acompañar con unos ojos intensamente delineados y sombreados con negro, cosa que antes era considerada de pésimo gusto. "Eso de que hay que destacar o la boca o los ojos es mentira", asegura Constanza. "Ya no hay reglas en el maquillaje. Poner harto color en los labios y en la mirada al mismo tiempo está permitido, siempre que se haga bien. Lo único que yo recomiendo, para no caer en excesos que resulten chocantes, es recurrir a este look sólo de noche. De día, se puede usar el labial rojo y maquillar los ojos de manera más sutil".
Para llevar con prestancia el labio rojo Constanza aconseja:
• Usar rojo sólo si se tienen labios perfectos. Como se trata de un color tan fuerte, cualquier asimetría saltará a la vista con mayor fuerza. El rojo no le sienta bien a las bocas levemente chuecas, y a los labios pequeños los hunde aún más. "Todos estos defectos se pueden corregir con un delineador labial, pero es difícil que lo logre una mano no profesional", advierte Constanza.
• Preferir el rojo-sangre. Opaco o nacarado, es el color que le queda bien a casi todos los tonos de piel; el más cálido rojo italiano –"rojo Ferrari", como lo llama Constanza– sólo debe ser usado por mujeres de piel morena. Para darle volumen a la boca, puede usar distintos tonos de rojo, dejando el más brillante o más fuerte para la zona central del labio. Si lo hace, difumine bien el color, de manera que no se noten los límites entre un color y otro.
• Usar delineador. A diferencia de los labiales en tonos claros, que no necesitan delinearse, al usar rojo es indispensable separar bien el color de los labios del resto de la piel. Use delineador en lápiz o con pincel, siempre en un tono levemente más oscuro que el que va a usar en el resto de la boca.
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