El fin de semana pasado, el Presidente Gabriel Boric aprobó varios nombres para ser nominados en distintas embajadas.
Además de los que ya han sido confirmados formalmente -Paula Narváez (ONU), Sebastián Krajlevic (OEA), Francisco Saffie (OCDE)-, y los que han trascendido como Juan Gabriel Valdés (Estados Unidos) y Bárbara Figueroa (Argentina), el Mandatario dio luz verde a la Cancillería para solicitar el beneplácito a sus respectivas destinaciones para otras reconocidas figuras de la centroizquierda.
Se trata del exdiputado PPD Tucapel Jiménez, cuyo nombre fue propuesto por el PPD y -según fuentes oficialistas- fue enviado por el Ministerio de Relaciones Exteriores para recibir el beneplácito de Suecia. En dicho país, el hijo del dirigente sindical homónimo -quien fue asesinado por la DINE-, vivió el exilio y recibió parte importante de su formación, graduándose de ingeniero en ejecución eléctrica. Incluso, uno de sus hijos reside actualmente ahí.
Otro nombre que está a la espera del respectivo “agreement” -según confirman fuentes diplomáticas- es el del excandidato a senador por la Región Metropolitana y secretario general de RD, Sebastián Depolo. El nombre del dirigente fue propuesto por su partido luego de su derrota en las parlamentarias pasadas, cargo por el que compitió tras perder también en la primaria de la gobernación. En su momento su nombre sonó para asumir en cargos de segunda línea del gabinete, lo que finalmente no ocurrió.
Una de las destinaciones que ha sido mirada con mayor atención por los partidos oficialistas es la embajada de España, sobre todo, porque ese país el próximo año asumirá la presidencia de la Unión Europea. Ahí, sin embargo, Boric optó por uno de sus cercanos. Se trata del abogado Javier Velasco, militante de Convergencia Social y amigo del frenteamplista desde sus años universitarios. Participó en la campaña presidencial que lo llevó a La Moneda y es cercano al diputado de ese partido Gonzalo Winter, de quien fue asesor legislativo. Al ser consultado por este medio, el jurista declinó referirse.
