Algunas mujeres tienen suerte y pueden usar cualquier cosa o nada en lo que respecta a la ropa interior. Otras, sin embargo, especialmente aquellas con piel íntima más sensible o aquellas propensas a infecciones —incluyendo vaginosis bacteriana u hongos— pueden beneficiarse de usar ciertos materiales y modelos que permiten que su piel genital “respire”. Después de todo, los hongos y las bacterias tienden a prosperar en la humedad, algo a lo que esa zona es muy propicia.
¿Debiésemos ser más minuciosas al momento de elegir la ropa interior? Cuando de calzones se trata, mucho; así como las mujeres que tienen mucho busto deben también procurar comprar siempre buenos y firmes sostenes.
Para aprender a elegir, para conocer más sobre telas, modelos, calces y otros detalles, en Práctico conversamos con tres ginecólogas para resolver algunas de las clásicas dudas respecto a este delicado tema.
1. ¿Importa la tela con la que esté fabricado el calzón?
La respuesta de buenas a primeras es sí, importa. La tela de tu ropa interior puede marcar la diferencia para la salud de tu zona genital. Para evitar problemas no tan simpáticos en esta región, los expertos en salud sugieren usar pares de ropa interior de algodón nuevos, limpios (sí, insisten en la limpieza) y que queden bien para permitir la transpiración y absorber la humedad. La doctora Andrea Schilling, ginecóloga de la Clínica Alemana, nos explica que la clave es elegir telas que dejen salir la humedad, que eso es lo fundamental, puesto que si ésta no se libera el calzón se convierte en un catalizador para la infección.
Pero ¿cuáles serían estas telas “respirables”?
Algodón:
El algodón ocupa el primer lugar. Se lleva el premio al mejor si tenemos que elegir. Si bien se moja con las secreciones normales de los genitales, explica la especialista de la Clínica Alemana, estas secreciones se evaporan y queda la esa secreción normal que suele adherirse al el calzón, pero finalmente se seca sin dejar rastro de humedad.
Si hay que elegir una tela, la doctora Cecilia Goyti, ginecóloga de Clínica Universidad de los Andes, tampoco oculta su favoritismo por el algodón, porque mientras menos sintético sea el calzón mucho más estarás cuidando tu salud genital.
Pero la doctora Carmen Luz Alvarado, ginecóloga de la Clínica Indisa, dice que, si bien su favorito también es el algodón, hoy en día las telas vienen tan mezcladas que a veces es complejo encontrar un calzón 100% de esta fibra textil. “Probablemente tienen en algún grado alguna otra fibra sintética si revisan la etiqueta, pero mientras que el porcentaje de algodón sea alto, todo está bien”, detalla.
Calzón de algodón orgánico corte bikini
Microfibra:
La microfibra es otra recomendación de la ginecóloga de la Alemana que, al igual que la doctora Alvarado coincide que no todo se limita al clásico algodón cuando de calzones se trata, porque digámoslo, a veces uno quiere estar un poco más arreglada bajo la ropa y el algodón no es sinónimo de estilo o sensualidad. Pero la microfibra, que está compuesta mayoritariamente de poliéster -al igual que la tecnología dry fit- sí deja salir la humedad, asegura la doctora Schilling.
Pantaleta microfibra con encaje
Encaje:
Lo mismo ocurre cuando el encaje es real dice ella, pero acá hay que tener mucho cuidado, explica. El problema está en aquella ropa interior “estilo encaje” que no es más que una impresión, una imagen marcada en una tela sintética, plástica, que asimila el encaje, eso hace pésimo, muy mal, añade.
Bikini Encaje Blanco
Y lo no respirable...
Lycra:
“La peor, hay que evitarla”, dice la doctora Schilling. La lycra es muy mala por que parece un plástico, continúa explicando, y al mantener la humedad predispone los hongos y también las alergias.
Hay algunos calzones de lycra que quieren engañarnos llevando en la parte de contacto directo con la zona genital, una pequeña cobertura de algodón. ¿Eso sirve? La respuesta de la ginecóloga es rotunda: NO, porque bajo esa pequeña tela de algodón sigue habiendo lycra que no deja pasar la humedad y el problema seguirá siendo exactamente el mismo.
2. ¿Influye el modelo y el calce? Comodidad ante todo
¿Tanga, pantaleta, bikini, colaless, elasticado, con control, sin costuras...? Existen distintos diseños de calzones y lo importante, generalmente, es que nos queden cómodos, que no nos aprieten y que sean de la talla correcta.
La ginecóloga de la Clínica Indisa, Carmen Luz Alvarado, no se declara muy amiga de los colaless. “Produce molestias, irritaciones y más que infecciones, pueden provocar dermatitis, y en este caso el problema es más la forma del calzón que la tela, más aún sin el porte no es correcto”. Además, indica ella, muchas veces, las lesiones que provoca un colaless pueden ser confundidas con infecciones. No obstante, tampoco es que no se puedan ocupar nunca, no es necesario ser tan drásticas. Si alguna vez la tenida no nos deja otra opción, se pueden usar, pero en ese caso entonces debemos intentar que sea de la talla correcta e idealmente de algodón.
Ojo también con la ropa interior apretada, dicen estas especialistas, porque no solo es a menudo incómoda cuando se usa durante largos períodos de tiempo, sino que tampoco es la situación más saludable para tu vagina porque limita el flujo de aire. Y es tan importante como usar material adecuado.
La doctora Cecilia Goyti de la Clínica de la Universidad de los Andes dice que la idea es que el calzón quede cómodo, porque si no, el roce con la tela y los elásticos puede generar lesiones por contacto. Usar ropa interior demasiado ajustada puede causar fricción y provocar quistes, vellos encarnados, marcas en la piel y otros problemas. ¿Te suena alguno de ellos?
La solución no es demasiado complicada: solo intenta comprar los tamaños y estilos que se sientan bien en su cuerpo.
3. ¿Dormir con o sin calzón?
“Se debe siempre dormir sin calzón” asegura la doctora Alvarado. “Basado en la misma hipótesis de por qué dormimos sin sostenes, al cuerpo hay que dejarlo libre, hay que dejarlo respirar, si lo mantenemos siempre en contacto con una tela podemos irritar la zona”, señala esta especialista.
Además de eso, hace hincapié en un punto muy invernal, en los pijamas de polar, de los cuales se declara bastante enemiga porque de respirables no tienen nada. Para ella, no sacamos nada con dormir sin calzones y dejar respirar nuestra zona íntima por unas horas si al final la vamos a “enclaustrar” en un pijama de polar. Lo mejor según ella, son los pijamas de algodón, hay algunos más gruesos que otros, pero “si tiene frío mejor agregue una frazada más y no se ponga el pijama de polar”, asegura.
4. ¿Necesito calzones especiales para hacer deporte?
Si bien hay telas especiales y las marcas deportivas también han sacados sus líneas de ropa interior con sus tecnologías especiales transpirables que no retienen la humedad, la ginecóloga de la Clínica de la Universidad de Los Andes, explica que al hacer actividad física, al igual como cuando uno se baña en la piscina, lo más importante es secar la zona genital y poner ropa seca luego de la actividad, más que el contar con una ropa especial para estas actividades. Pero si eres deportista extrema, del alto rendimiento o quizás pretendes convertirte en una, existen algunas posibilidades. Aquí una:
Pack 3 calzones deportivos
5. ¿Lavado especial?
“La ropa interior se debe lavar aparte y con jabón hipoalergénico”, dice la doctora Cecilia. En términos generales, las expertas aseguran que hay que tratar esta zona del cuerpo y de nuestra piel con la mayor sensibilidad posible y para eso hay que evitar los colorantes y los perfumes. Hay pieles que son más delicadas que otras, por supuesto, y que requieren más cuidado, pero las ginecólogas coinciden en que no está mal tener un poco de precaución con nuestros genitales.
Aunque tus calzones sean blancos, intenta también evitar tratarlos con productos de blanqueamiento como cloro u otros, porque la sobreexposición a estas fuertes sustancias químicas podría causarte reacciones alérgicas. Además, no es una buena recomendación no solo en materia de salud, sino para cuidar la calidad de la tela. Este tipo de productos suele dañar mucho las delicadas y delgadas telas de la ropa interior.
Por otro lado, muchas mujeres, con el fin de cuidar este tipo de prenda, suelen lavar calzones y sostenes a mano y los dejan remojando un buen rato. Esto se puede traducir en un mal enjuague que a la vez puede provocar una reacción alérgica. Por eso, si lavan sus calzones a mano, el consejo de la ginecóloga Carmen Luz es el doble enjuague siempre, algo más esencial incluso que lavar con un jabón hipoalergénico.
6. ¿Protectores diarios?
No todos los días, dice la doctora Cecilia Goyti, quien se nota mucho más enemiga que amiga de estos productos. La razón, explica, es que pasa exactamente lo mismo que con las telas sintéticas que no dejan respirar la zona genital, aunque haya algunos de algodón. Usualmente, los ginecólogos no recomiendan usar protectores todos los días, sino solo en aquellos días en que el flujo vaginal es más abundante, como las manchas al comienzo o al final de un período menstrual o durante el periodo de ovulación. Por qué, acá las razones:
- Porque si el protector diario no se cambia cada 3-5 horas, puede crear un ambiente propicio para bacterias cerca de la vulva. Estas bacterias puede ingresar a tu cuerpo y provocar vaginosis bacteriana.
- Porque si están perfumados (la gran mayoría), los protectores pueden causar irritación o alergias en el área de la vagina. Picazón, enrojecimiento y sensaciones desagradables son las principales señales de que está sufriendo una reacción alérgica.
- Porque si no se cambian en el momento adecuado, los protectores con materiales que no sean de tela pueden causar el llamado efecto invernadero en la zona genital.