El sector de la construcción, muy golpeado por la pandemia, avanza a pasos todavía lentos. La incertidumbre política ha sido uno de los obstáculos. Si bien la cifra promedio de ingreso de nuevas obras en nuestro país ha sido levemente mejor que en 2020, aún está muy lejos de los registros de 2019, cuando la pandemia aún no estaba en el horizonte.

El ingreso de nuevas obras registró en noviembre la cifra más baja desde julio de 2020, y los números están muy abajo del promedio de 2019, según datos entregados por IConstruye. Esta caída se explicaría en parte porque las empresas postergaron sus decisiones de inversión para después de las elecciones presidenciale, y ahora esperan mayores certezas con respecto a la administración que asumirá a partir del 11 de marzo de 2022.

En total, en el undécimo mes del año ingresaron 16 nuevas obras. Desde enero de 2020 a la fecha, es el cuarto mes con más bajo registro. La caída del undécimo mes es de un 48% con respecto a octubre, cuando ingresaron 31. Además, registró un retroceso de un 38% con respecto al promedio histórico de 2020 y de un 73% con respecto a 2019. En la vereda opuesta, enero fue el mes del año con mayor cantidad de obras ingresadas con un total de 59, y también el de mejor registro en casi 2 años.

La cifra promedio de proyectos ingresados entre enero y noviembre de 2021 es de 28. Esto equivale a un alza de 7,7% con respecto a 2020, cuando el promedio en dicho periodo fue de 26. Pero está poco más de un 50% por debajo del promedio de 2019 cuando se iniciaban cerca de 60 obras al mes.

“Esta disminución que observamos en cuanto al ingreso de nuevas obras a nivel país, se entiende principalmente porque, al igual que varias decisiones en la gran mayoría de las empresas, hay ciertas definiciones que se habían estado posponiendo para después de los resultados de las elecciones presidenciales, y que probablemente continuarán hasta tener mayores certezas respecto a las prioridades políticas del Presidente electo, y su plan fiscal de mediano plazo”, dijo en un comunicado Yuval Shats, chief revenue officer (CRO) de IConstruye.

La mayor cantidad de obras nuevas ingresadas en noviembre se concentraron en la Región Metropolitana (11), seguida por Valparaíso (2), Coquimbo (1), Los Ríos (1) y Magallanes (1).

Estos 16 nuevos proyectos, se suman a las 1.046 obras que están en ejecución en el país. Del total, un 73% corresponde a proyectos residenciales (departamentos y casas), un 13% a infraestructura (obras viales, marítimas, portuarias, mineras y salud), un 9% a obras comerciales (oficinas, centros comerciales, hoteles, plazas, gimnasios, centros educativos y estadios) y un 5% a obras menores.

Casi el 60% de las obras en ejecución están ubicadas en la Región Metropolitana, lo que corresponde a 614 obras. Luego viene la Región de Valparaíso con 103, Biobío con 50, Los Lagos con 46 y Coquimbo con 37. Por otro lado, un 38% de los proyectos en ejecución está en etapa de terminaciones, un 35% en obra gruesa, un 21% en obras previas y un 6% en fundaciones.

El monto promedio por transacción, que dice relación con el costo de materiales, alcanzó en noviembre un nivel histórico de 43% por sobre el promedio de 2019. Además, en el undécimo mes creció un 7% con respecto al mes anterior.

“El principal factor sigue siendo el alto precio de los materiales, a raíz del aumento generalizado en los precios de transporte a nivel mundial que han presionado esta constante y sostenida alza. Pese a que los precios de los materiales están por sobre los niveles prepandemia, las obras en ejecución continúan gastando en menor medida en comparación al 2019, producto de la ralentización de los proyectos”, explicó Shats.

La Región de O´Higgins es la única que ha superado de manera sostenida el monto transado por obra, por sobre su nivel promedio del 2019.