La neozelandesa Fonterra avanza en su salida de Chile: “La desinversión de Soprole está en marcha”

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La compañía contrató en diciembre a los bancos de inversión que liderarán en el proceso. Ya desarrollaron el teaser y el documento descriptivo de la firma y se envío a una lista larga de posibles interesados. El grupo neozelandés espera que la operación local, además de la australiana -cuya venta aún está en análisis- le signifiquen unos US$1.000 millones en capital a los accionistas.


Nueve meses han pasado. A mediados de septiembre, la gigante Fonterra anunció sus intenciones de vender su filial local. De esa manera, la cooperativa neozelandesa ponía en el mercado la propiedad de la tradicional Soprole, que llevaba ya más de 30 años en manos del grupo lechero. En diciembre se definieron los bancos de inversión –JP Morgan, UBS y Jarden- y ahora el proceso iría en línea recta.

Lo que está en venta es Soprole Inversiones S.A., sociedad controladora de Soprole y Prolesur, y que es controlada por Dairy Enterprises S.A., la que posee el 99,85% de las acciones. Dairy Enterprises, a su vez, es manejada en un 100% por Fonterra Co-Operative Group Limited, una cooperativa neozelandesa con más de 10.500 asociados, ninguno de los cuales posee más del 0,2% de su capital. El 0,15% de las acciones restantes de Soprole Inversiones se encuentra distribuido en aproximadamente 600 accionistas, señala la firma en su web.

A fines de mayo, Fonterra hizo una actualización del desempeño de sus negocios. El CEO de la compañía, Miles Hurrell, dio luces de la venta de la láctea. “Seguimos revisando la propiedad de nuestro negocio australiano y el proceso de desinversión de nuestro negocio chileno, Soprole, está en marcha”, puntualizó. Hurrell añadió: “Nos estamos tomando nuestro tiempo para asegurar los mejores resultados para ambos negocios y seguimos confiando en cumplir nuestra intención de devolver alrededor de US$1.000 millones de capital a nuestros accionistas para el año fiscal 2024″.

Un mes antes había destacado que “el proceso va muy bien”. “Tanto Soprole como Fonterra Australia están funcionando bien y nuestra prioridad es maximizar el valor de ambos negocios para nuestra cooperativa”, subrayaron en su memoria anual.

La finalidad detrás de eso es concentrarse e impulsar el negocio de Fonterra en Nueva Zelandia.

Y así el proceso local avanza. JP Morgan ya desarrolló un teaser para el proceso y, luego, un memorándum descriptivo que remitió a una lista larga de posibles interesados. Tras ello, el banco a cargo del proceso deberá definir una lista corta. Y como es tradicional en este tipo de procesos, será este grupo reducido el que podrá acceder a realizar un due diligence de la firma y tener un acceso más amplio a la compañía, a conocer sus instalaciones y recibir reportes de sus ejecutivos. Luego de eso se debería iniciar la recepción de ofertas no vinculantes, para finalmente saltar a las propuestas vinculantes.

Desempeño nacional

Hoy, la operación de Fonterra en Chile es uno de los impulsores del negocio. Durante la presentación trimestral de los nueve meses terminados en abril, la matriz profundizó en ello: “Los volúmenes de ventas aumentan gracias a la mayor recogida de leche y el crecimiento continuo de nuestro negocio en Chile”, señalaron. En Latinoamérica, sus ingresos se elevaron un 10%, hasta los US$538 millones. “AMENA -África, Este Medio, Europa, Norte de Asia, América- ha seguido obteniendo buenos resultados. El EBIT normalizado fue de US$406 millones, un 30% más, debido a de los márgenes brutos en nuestro canal de Ingredientes, y a los buenos resultados de nuestro negocio en Chile”, reiteraron.

Ello en un contexto en que los volúmenes de ventas de Fonterra disminuyeron como resultado de una menor recogida de leche y de los impactos a corto plazo de la demanda por, entre otras cosas, los cierres en China, la crisis económica en Sri Lanka y el conflicto entre Rusia y Ucrania.

Los ingresos de Soprole, en tanto, crecieron 18% en el primer trimestre de 2022, alcanzaron los $153.611 millones. Las utilidades se elevaron 103,9%, totalizando los $13.318 millones. Tal desempeño respondió a un aumento de un 4,3% en la venta en volumen y un 13,2% en valor, impulsado básicamente por el canal consumidor. Los costos de la compañía nacional también aumentaron 18%. Esto fue determinado por el aumento del precio pagado por litro de leche a productor por Soprole Inversiones, a través de ambas filiales, que fue un 15% superior al primer trimestre del año anterior.

La variación positiva sigue en línea con los resultados de todo 2021, cuando sus ingresos subieron 19,1%, hasta $ 582 mil millones. El margen bruto del negocio ascendió a $ 162 mil millones, con un salto de 30,3%.

En sus conversaciones con inversionistas, ejecutivos de Fonterra han sostenido que el buen desempeño de su negocio chileno se vio impulsado por las ayudas estatales durante la pandemia.

Hoy, Soprole, una compañía fundada en 1949, tiene el 31% del total de las ventas en valor de productos finales lácteos. Mientras la filial Soprole opera un complejo industrial en San Bernardo y fábricas de productos frescos y refrigerados, leche UHT, margarinas y jugos y aguas embotelladas; Prolesu tiene plantas en Los Lagos y Osorno. En total, tiene 1.813 trabajadores.

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