Cuando inició la pandemia en el país, justo las empresas estaban anunciando el reparto de dividendos que harían en la junta ordinaria con cargo a las utilidades de 2019. La mayoría, finalmente, decidió ir por el reparto mínimo de ganancias, que es el 30%. Pero otras, como Cencosud, fueron por más y recibieron críticas.

El reparto del 80% de las utilidades del retailer fue polémico, no solo porque lo concretó en un momento en que el coronavirus estaba impactando a toda la economía, y en particular al retail, sino que también porque su filial Paris comunicó que se acogería a la Ley de Protección al Empleo con 7.731 trabajadores. De hecho, esto generó que el Congreso despachara una ley que prohíbe reparto de dividendos a firmas que se acojan a esta ley.

Ahora las empresas ya parecen tener una visión más clara sobre el impacto que generará el Covid-19 en sus finanzas: varias han anunciado o ya han repartido dividendos extraordinarios.

Sin ir más lejos, este miércoles Santander informó que distribuiría como dividendo extraordinario el 30%de las utilidades de 2019. Esto se suma al reparto de 30% que ya hizo en la junta ordinaria a inicios de año. Todo ello, pese a que el mismo presidente de la Comisión para el Mercado Financiero, Joaquín Cortez, ha dicho que la industria bancaria no debe repartir más allá del mínimo que exige la ley.

Desde Santander aclaran que esto ocurre “tras la realización de esfuerzos significativos a lo largo del año, orientados a reforzar la posición de Santander Chile en materia de solvencia”, dijo el directorio del banco, ya que en abril de este año decidieron no repartir más de 30% “a la espera de tener mayor visibilidad sobre la evolución de la crisis Covid-19”.

Agregaron que “el directorio de Santander Chile estima que hoy se encuentra en una posición de solvencia más robusta de cara al cierre de año”, y que esto “se deriva de acciones como la emisión de bonos subordinados por US$600 millones y la constitución de provisiones voluntarias por US$75 millones en los primeros nueve meses del año, lo que le ha permitido llevar el ratio de adecuación de capital hasta 15,13% al 30 de septiembre de 2020, siendo este el nivel más elevado de este indicador desde 2009”.

Por otro lado, Provida aprobó repartir $254 por acción, equivalente al 32% de las utilidades retenidas, donde una parte es con cargo a utilidades de 2019. Cuprum también realizará una junta extraordinaria de accionistas el 26 de octubre para votar el pago y reparto de un dividendo definitivo, con cargo a utilidades retenidas.

Las AFP también anunciaron a inicios de año una baja en el reparto de dividendo que tenían presupuestado, luego de críticas que surgieron. Por ejemplo, la ministra del Trabajo, María José Zaldívar, había dicho que “son señales bastante equívocas”.

Asimismo, Grupo Security acordó repartir un dividendo provisorio de $0,75 con cargo a las utilidades de 2020.

En tanto, en septiembre la junta extraordinaria de accionistas de SQM aprobó una distribución de dividendos eventual de US$0,37994 por acción, equivalente a US$99 millones.