Más negocios. Mayores montos transados. El mercado de renta fija local repuntó en 2023, de la mano de una mayor demanda de inversionistas institucionales, pero también por las colocaciones de papeles en la ultima parte del año.
Según datos de la Bolsa de Santiago, los montos negociados en 2023 treparon 9,98% respecto del ejercicio previo, totalizando US$158.751 millones, mientras que el número de negocios llego a 165.444, es decir un 19,16% más que los reportados en 2022.
Andrés de La Cerda, gerente de Mesa Renta Fija E Internacional de BICE, explica que “si bien vimos un crecimiento en los montos transados, gran parte del flujo se concentró en papeles a plazos no superiores a los 3 años. Esto se vio especialmente en la industria de fondos mutuos, dentro de los instrumentos libres de riesgo el bono más transado fue el de Tesorería con vencimiento marzo 2026″.
El experto explica que “con la tasa de política monetaria llegando a niveles de 11,25% tuvimos una curva de renta fija invertida donde los papeles a corto plazo entregaban un rendimiento muy superior a los de largo plazo y esto llevó a que la demanda y por lo tanto los flujos se concentraran en esta parte de la curva. Por su parte en la industria de AFPs se vio una fuerte demanda por bonos de la Tesorería y Corporativos a plazos de 10 año o más”.
A pesar de que los montos transados subieron, el caso de las colocaciones fue distinto. Según datos de la Bolsa de Santiago, en 2023 las emisiones en el mercado local alcanzaron los US$8.540 millones, una caída de 9,55% respecto de 2022. Sin embargo, el monto es superior a los US$.1558 millones de 2021, año marcado por la pandemia donde las empresas fortalecieron su caja y paralizaron proyectos de inversión.
En tanto, las colocaciones de efectos de comercio - papeles de deuda a plazo máximo de un año-, ascendieron a US$6.539 millones, un incremento de 135% respecto del monto colocado en el año 2022. Scotiabank lideró las emisiones totalizando US$1.324 millones.
Klaus Kaempfe, director de portfolio solutions en Credicorp Capital, señala que entre agosto y octubre las tasas se empinaron y colocaciones de bonos corporativos “se secaron, pues los emisores prefirieron esperar para ver si la subida era transitoria. En noviembre, con la caída de los tipos, salieron a colocar fuerte”.
Prueba de la recuperación del mercado local fue que en diciembre, por segundo mes consecutivo, los fondos D y E obtuvieron ganancias: de 3,88% y 3,56%, respectivamente.
Mercado en recuperación
Pero si bien las cifras apuntan a un recuperación del mercado, los expertos coinciden en que esto aún no ocurre del todo. Kaempfe indica que “el mercado sí se está recuperando desde un punto bajo, ya que la mayor parte de las ahorros de las personas continúan en depósitos a plazo. Esperamos que este fluya a bonos hacia adelante”.
“Pensando en el mercado de capitales, este escenario resultó poco favorable para emisores de menor clasificación crediticia o bien interesados en emitir en plazos cercanos a los 5 años. Me parece que en la medida que se recupere la demanda por estos instrumentos podremos decir que el mercado ha superado los efectos de los retiros, inflación y tasa de política monetaria históricamente altas”, dice de La Cerda.
Según el reporte de Bice sobre flujos de inversionistas institucionales, para noviembre de este año el porcentaje de los fondos de pensiones invertidos en renta fija local llegó a 46,2% del total de los fondos, por sobre el 45,3% y 45,2% de octubre y septiembre, respectivamente, pero por debajo del 48,1% que reportaba para el onceavo mes de 2022.
En su Informe de Estabilidad Financiera (IEF) del segundo semestre, el Banco Central volvió a alertar sobre la situación; “Indicadores relacionados con la profundidad del mercado de capitales local continúan bajos en perspectiva histórica y sin mayores cambios desde el IEF anterior”, dijo el emisor.
En esa línea, sostuvo que “si bien desde fines de 2022 el mercado de renta fija ha presentado mayores montos transados considerando tanto operaciones en bolsa como OTC, dichos montos en UF alcanzan cerca de un 50% de lo registrado antes de la pandemia”, y agregó que “las emisiones locales de bonos se ubican por debajo de promedios históricos y del registro de 2022, especialmente las del sector corporativo”.