Twitter dejará de ser una empresa que cotiza en Wall Street y el mercado ya empieza a ver las acciones de la empresa con otros ojos. La privatización de la compañía se confirmó ayer tras el anuncio de la compra de la red social por parte del hombre más rico del mundo, Elon Musk.

En concreto, la acción de Twitter en el día bajó un 3,93% y cotiza a un valor de US $49,67 por cada papel de la compañía. Tras el cierre de la jornada, las acciones de Twitter rompieron una racha de cuatro jornadas consecutivas al alza.

El mal desempeño de la acción de Twitter también se da en una jornada en que Wall Street se tiñó de rojo y el S&P 500 bajó 2,82%.

Ayer, el multimillonario había anunciado que cerró la compra de Twitter por US $44 mil millones, y las acciones de la empresa cerraron con un alza de casi 6%.

Por otro lado, en lo que va del mes de abril, las acciones de Twitter acumulan un alza de 28,41%. En el mismo periodo de tiempo, los papeles de la red social son los que más suben del S&P 500, índice que baja 7,84% en lo que queda de abril.

Mientras que, en lo que va del 2022, las acciones de Twitter acumulan una subida de 14,95%.

El acuerdo de venta de Twitter, que fue aprobado por unanimidad por la junta de la compañía, se espera que se complete a finales de este año y la red social pase a ser una empresa privada.

Tesla también cae

Tesla se desplomó ante la preocupación de los inversionistas por la posibilidad de que el presidente ejecutivo, Elon Musk, venda parte de su participación en el fabricante de autos eléctricos para ayudar a pagar la compra de Twitter, según consignó Reuters.

La empresa de Elon Musk perdió aproximadamente US$ 126 mil millones de su valoración bursatil tras que las acciones cayeran un 12,18%.

En esa línea, Tesla contribuyó más que ningún otro valor a la fuerte caída del S&P 500.

Sin embargo, las acciones de Tesla también caen en medio de una venta masiva en los mercados de valores de todo el mundo debido a una expansión económica más lenta y una inflación persistente en EEUU y el mundo. Además, los inversionistas han huido de las empresas de alto crecimiento mientras la Reserva Federal de EEUU se prepara para embarcarse en una serie de aumentos de tasas significativas, según destaca Bloomberg.