La Superintendencia del Medio Ambiente (SMA), entidad liderada por la abogada Marie Claude Plumer, formuló cargos contra la empresa salmonera Australis Seafood por graves infracciones cometidas en sus centros de engorda de salmones, produciendo más de lo autorizado en sus permisos ambientales.
La compañía se había autodenunciado en noviembre de 2022. En su presentación, la empresa de propiedad de la gigante china Joyvio, reconoció que en 33 de sus centros de cultivo registró sobreproducción de hasta 80%, en sus instalaciones ubicadas en Aysén y Magallanes. En todo ellos la tasa de producción de salmones supera los volúmenes autorizados por la autoridad ambiental cuando aprobó su Resolución de Calificación Ambiental (RCA).
La superintendencia formuló cargos por ahora en nueve centros de engorda y aun mantiene pendientes las resoluciones por los otros centros de cultivo. Las notificaciones realizadas este lunes identifica a los siguientes centros de cultivo en los que Australis excedió su producción: Humos 1 (multa de 5.000 UTA); Humos 2 (10.000 UTA); Luz 1 (5.000 UTA); Luz 2 (5.000 UTA); Traiguén 1 (15.000 UTA); Humos 5 (10.000 UTA); Humos 6 (10.000 UTA); Matilde 3 (8.000 UTA) y Bahía León (5.000 UTA). Este último está ubicado en Magallanes y el resto en Aysén.
Con ello, todas esas infracciones suman multas a beneficio fiscal de 73.000 UTA ($54.7606 millones, unos US$68 millones). A ello habrá que sumar las formulaciones de cargos de los restantes centros de cultivo. Sin embargo, desde la SMA aclaran que la autodenuncia es un instrumento de incentivo al cumplimiento regulado en el artículo 41 de la Ley Orgánica de la Superintendencia del Medio Ambiente (LOSMA) y su presentación permite al infractor optar al beneficio de una exención o rebaja de la multa que correspondería aplicar respecto de la o las infracciones que sean objeto de la autodenuncia, en diversos escenarios dentro del procedimiento sancionatorio.
La polémica por la sobreproducción está en el centro de una disputa millonaria en la que se encuentran los dueños chinos de Australis y su anterior propietario, Isidoro Quiroga, quien vendió la firma en 2019 en US$ 921 millones. Los asiáticos acusan al vendedor de Australis de ocultar información en el proceso de negociación de la compra de a salmonera, y que estos hechos no fueron reportados como contingencias. El family oficce del empresario chileno, Inversiones Benjamín, ha negado que hubiese ocultado información a los nuevos dueños y que la autoridad regulatoria cambió de parecer y aplicó estándares más estrictos sobre los niveles de sobreproducción.
La superintendenta Marie Claude Plumer negó un eventual cambio de parecer de la entidad regulatoria. “No sé en que se justifica esa aseveración. Lo que sí es cierto es que la Superintendencia ha mantenido una consistencia que viene incluso de un fallo muy importante de la institucionalidad ambiental fiscalizadora en materia acuícola. Se trata del fallo de la Corte Suprema relacionado con la empresa Los Fiordos en el cual fue la primera sanción importante que se aplica a la industria asociados a cargos de sobreproducción y donde ahí mismo el tribunal estableció una fórmula en que se determina la sobreproducción”.
“No conozco que haya habido un cambio sobre cómo se ha entendido la sobreproducción, por lo tanto las formulaciones de cargos y la configuración de los hechos infraccionales que motivaron esta autodenuncia en un comienzo fue aprobada”, agregó.
La jefa del servicio añadió que se trata de la mayor autodenuncia de una empresa en la industria salmonera.
En el proceso ante la SMA, Australis es asesorada por los socios de VGA, Mario Galindo y José Luis Fuenzalida.
¿Hubo daño en el lecho marino?
La superintendenta explicó que “dentro de las formulaciones de cargos que vendrán ahora, hay un par que serán acotadas por daño ambiental (...) En este momento en el marco de la autodenuncia, la posibiidad de decretar medidas de suspensión es parte de las atribuciones de la SMA y requieren la existencia de riesgos inminentes”.
En el caso del CES Bahía León (Magallanes, dentro de Kawésqar), se identificó daño ambiental susceptible de reparación. En la formulación de cargos se establece que “producto de la sobreproducción constatada, la empresa generó un detrimento en la calidad química de la columna de agua, generando una condición anaérobica al superar la capacidad de carga del ecosistema. Esto, con la consecuente pérdida de hábitat y alteración de los servicios ecosistémicos que provee esa zona , además de la alteración de las condiciones en las que se desarrolla la flora y fauna marina”.
“Hoy con los antecedentes que disponemos no hay datos para que exijamos desde ya una suspensión, pero la información que se tiene estos centros no están produciendo”, concluyó en conversación con Pulso.
Australis apunta a Quiroga
Tras la notificación de estas resoluciones, Australis insistió en que “detectó la existencia de una política sistemática de sobreproducción de salmones ideada y ejecutada por la administración anterior” y recordó que el actual gerente general, Andrés Lyon, fue designado en el cargo en junio de 2022. “Una vez en el cargo, él detectó fuertes inconsistencias y anomalías en la operación de la compañía”, argumentó la firma.
“Se trata de actos vigentes al menos desde el año 2016 y que generaron una sobreproducción de más de 80 mil toneladas de salmónidos. Ante esto, tomamos diferentes medidas para erradicar de la compañía dichas malas prácticas que afectan tanto al controlador como a las autoridades y que dañan significativamente la fe pública”, insistió Australis.
Además, la empresa presentó un programa para compensar durante los próximos 5 años, hasta 2027, la sobreproducción denunciada. “Como empresa, controlada por un inversionista extranjero responsable, sabemos que esta autodenuncia tendrá un impacto negativo en el corto plazo para nosotros. Sin embargo, estamos haciendo lo correcto para velar por el cumplimiento de la regulación ambiental chilena”, concluyó la firma.