Los estándares de los bancos para el otorgamiento de crédito de la cartera de consumo se han vuelto más restrictivos y no se observan cambios significativos en el segmento de vivienda.
Según le Encuesta Sobre Créditos Bancarios del Banco Central, en el caso de los préstamos de consumo, la fracción de bancos que reporta condiciones más estrictas en el segundo trimestre llegó a 33%, aunque la cifra fue menor al 55% de los primeros tres meses del año.
En tanto, para los créditos de vivienda, la mayoría de los bancos encuestados (73%) no reporta cambios de sus estándares de otorgamiento.
Pymes y grandes empresas
Las condiciones de oferta de crédito para las pymes se restringen respecto del trimestre previo y no tuvieron mayores cambios para las grandes empresas.
La fracción de entidades que reportó estándares de otorgamiento más exigentes para las pymes alcanzó 36%, similar a lo reportado el trimestre anterior, y disminuyó la proporción de instituciones que flexibilizaron sus condiciones (desde 18% a 0%).
En tanto, para las firmas grandes, la fracción de bancos que informaron estándares más estrictos se redujo desde 31% a 15%.
En cuanto a las condiciones de otorgamiento de crédito a empresas constructoras e inmobiliarias, estas continúan restrictivas. Sin embargo, para el primer caso, la proporción de entidades que reportó condiciones de crédito más estrictas disminuyó desde 40% a 30%, mientras que, en el caso de las empresas inmobiliarias, la reducción fue desde 46% a 18%.
Demanda
En medio de un escenario de altas tasas de interés la demanda de los hogares tanto de créditos de consumo como de vivienda se percibe más débil, aunque en menor medida que en el primer trimestre del año.
Así en el caso de los préstamos de consumo, se reportó una caída de solicitudes de financiamiento para un 25% de los bancos reportantes, inferior al 64% registrado durante el trimestre anterior, y se mantuvo similar la proporción que percibía un fortalecimiento (9%).
Respecto a los créditos para la vivienda, la fracción de entidades que informó una demanda más débil disminuyó desde 55% a 27% y aumentó a 9% el porcentaje de bancos que señaló un incremento de la demanda.
De la misma forma, la demanda de crédito por parte de grandes empresas sigue contrayéndose, pero a menor ritmo que el período anterior, mientras se reporta una estabilización de la demanda por parte de las pymes.
Para el segmento de grandes firmas, la proporción de entidades que percibe una menor demanda cayó a 31%, respecto de 77% del período anterior. En cuanto a las pymes, la fracción de bancos que reportó un debilitamiento de la demanda se redujo desde 46% a 27%.
Una dinámica simlar se percibe para las empresas inmobiliarias y constructoras. Para el primer sector, el porcentaje de bancos que percibe una menor demanda pasó desde 82% a 46%. En el caso de las constructoras, la porción de entidades que reportó una demanda más limitada se redujo a 50%, desde 80% en el trimestre previo.
Los estándares de los bancos para el otorgamiento de crédito de la cartera de consumo se han vuelto más restrictivos y no se observan cambios significativos en el segmento de vivienda.
Según le Encuesta Sobre Créditos Bancarios, dada a conocer este martes por el Banco Central, en el caso de los préstamos de consumo, la fracción de bancos que reporta condiciones más estrictas disminuyó de 55% a 33%.
En tanto, para los créditos de vivienda, la mayoría de los bancos encuestados (73%) no reporta cambios de sus estándares de otorgamiento.
Las condiciones de oferta de crédito para las pymes se restringen respecto del trimestre previo y no tuvieron mayores cambios para las grandes empresas.
La fracción de entidades que reportó estándares de otorgamiento más exigentes para las pymes alcanzó 36%, similar a lo reportado el trimestre anterior, y disminuyó la proporción de instituciones que flexibilizaron sus condiciones (desde 18% a 0%).
En tanto, para las firmas grandes, la fracción de bancos que informaron estándares más estrictos se redujo desde 31% a 15%.
En cuanto a las condiciones de otorgamiento de crédito a empresas constructoras e inmobiliarias, estas continúan restrictivas. Sin embargo, para el primer caso, la proporción de entidades que reportó condiciones de crédito más estrictas disminuyó desde 40% a 30%, mientras que, en el caso de las empresas inmobiliarias, la reducción fue desde 46% a 18%.