BC: créditos que ha dado la banca a las empresas está acorde a “condiciones macroeconómicas”, pero mira con cautela datos recientes

En medio de una crisis que ha afectado a las empresas del sector inmobiliario y de construcción, el Presidente de la República, Gabriel Boric, el mes pasado pidió a los bancos no ser “coñetes”, y facilitar los préstamos para dicho sector. Eso abrió todo un debate, con argumentos cruzados entre la banca y el gobierno.

En el Informe de Política Monetaria (Ipom) de junio, el Banco Central (BC) abordó en un recuadro, no la situación de los créditos al sector construcción en específico, sino más bien la “evolución reciente del crédito comercial” en general, es decir, los préstamos que dan los bancos a las empresas.

El BC señala que “en el último año la TPM ha disminuido 550 puntos base, reduciendo significativamente el nivel de restricción de la política monetaria. Esta menor TPM se ha ido traspasando a las tasas de crédito bancario de corto plazo, tanto para las colocaciones a empresas como a personas. No obstante, el stock de colocaciones bancarias comerciales y de consumo sigue mostrando tasas de variación anual negativas, aunque menores a las que se observaban hace unos trimestres”.

Por eso en el recuadro mostraron “antecedentes adicionales sobre la evolución del crédito comercial bancario”, con el objetivo de “responder si su evolución es coherente con el encuadre macroeconómico o si, por el contrario, estaría contribuyendo a amplificar el ciclo más allá del resto de los fundamentos de la economía chilena”.

¿Y qué encontró finalmente el BC? El instituto emisor concluyó que “la actividad crediticia de las empresas ha evolucionado de acuerdo con las condiciones macroeconómicas imperantes. La evidencia en base a microdatos administrativos anonimizados sugiere que la evolución del crédito comercial obedece tanto a factores de demanda de las empresas como a factores macroeconómicos —actividad, expectativas de crecimiento y TPM—”.

Sin embargo, advierte que datos recientes sobre crédito comercial, del primer trimestre de 2024, “podrían indicar una desaceleración adicional en el trimestre en curso e inducen a cierta cautela. El Banco continuará monitoreando de cerca ésta y otras variables financieras”, señala el Ipom.