El 84% de las personas prefiere que la cotización adicional de 6% que se discute en la reforma previsional, vaya íntegra a sus cuentas individuales en la AFP, o que el 3% tenga ese destino, y la otra mitad a un fondo común solidario.
Eso es lo que revela la última encuesta Cadem realizada en septiembre, considerando que el resultado arrojó que el 51% quiere que esta cotización adicional vaya en su totalidad a cuentas individuales, el 33% distribuiría mitad y mitad, y el 12% optaría para que todo vaya a un fondo común solidario.
Este resultado que muestra el sondeo ocurre justamente en momentos en que el gobierno propone que la mitad de la cotización adicional se destine a cuentas individuales, y la otra mitad a un fondo colectivo; mientras en la oposición exigen que el 6% íntegro vaya a un fondo solidario.
Y el retiro del 10% también se hizo notar en el sondeo: el 84% de las personas ahora sabe que los fondos que tiene en la AFP pertenecen a las personas, el nivel más alto del que se tiene registro, ya que ahora solo el 8% dice que pertenecen a las AFP, y el 7% cree que es del Estado.
De esta manera, también cambió la percepción de las personas sobre quién prefieren que administre sus fondos de pensiones, ya que el 78% quiere poder elegir si el 6% de cotización adicional lo administra una institución estatal, o su AFP; el 16% quiere que todo sea administrado por una institución estatal, y el 5% por las AFP.
Roberto Izikson, gerente de asuntos públicos de Cadem, hace un análisis de estos resultados. “Lo que logró el retiro del 10% es traer a valor presente el beneficio futuro de lo que significaba ahorrar para 40 años más. El gran problema del sistema de pensiones es que las personas ahorran permanentemente para algo que ven en un plazo demasiado largo, entonces, al traerlo a valor presente en un porcentaje, que en este caso es el retiro del 10%, creo que se fortaleció todo el sistema”, comenta.
Esto se ve reflejado, según explica Izikson, en que “en primer lugar, la gente sabe que los fondos son suyos, aumentó más de 20 puntos. En segundo lugar, la libertad de elección, porque para este 6% de cotización adicional, (creen que) está bien que haya una institución estatal, pero la gente quiere poder elegir si quiere que sea la AFP o una institución estatal la que administre esos fondos. En tercer lugar, el 51% quiere que la totalidad (de la cotización adicional) vaya a su cuenta, el 12% quiere reparto, y el 33% está disponible a solidaridad. Esa solidaridad sí es un triunfo del movimiento social de octubre, eso es algo que antes no veíamos, antes la gente era mucho más individualista en ese sentido”.
Esa solidaridad a la que ahora están más dispuestos los chilenos, así como el efecto del retiro del 10%, también se refleja en una posible cotización a través del IVA u otro impuesto, cuestión que ha trascendido que el gobierno estaría evaluando.
Por ejemplo, cuando Cadem consultó “¿Estaría dispuesto a aportar más a través de un incremento de 1% en el IVA u otro impuesto en la compra de bienes o servicios, si se garantizara que esos recursos van a mejorar las pensiones?”, el 64% dijo que estaría dispuesto, el 33% dijo que no, y el 3% no sabe o no responde.
Es más, los que responden afirmativamente aumentan cuando se les consulta: “¿Y estaría usted dispuesto a aportar más a través del consumo para mejorar pensiones si la medida fuera para mejorar las pensiones de quienes menos tienen?”. En este caso, el 71% responde que sí estaría dispuesto, mientras que el 27% dice que no, y 2% no sabe o no responde.
Al respecto, Izikson dicen que “en el fondo, lo que quieren los chilenos, es que si la cotización va a ser 16% en total, están disponibles a que el 13% sea suyo, y agregar solidaridad de 3%, o complementar con un aumento de IVA, para que también hayan grados de solidaridad, pero siempre que sea más o menos 13% y 3%”.
Sobre la creación de una AFP estatal que compita con las actuales AFP, el 68% dice estar de acuerdo, el 28% en desacuerdo, y el 4% no sabe o no responde.
Por otro lado, al consultar a las personas si estarían “de acuerdo o en desacuerdo con la nacionalización de los fondos de pensiones, es decir, que pasen a control del Estado, conformen un fondo solidario, y dejen de ser una cuenta individual de propiedad del trabajador”, el 35% afirma estar de acuerdo, el 60% está en desacuerdo, el 4% no sabe o no responde, y 1% no está de acuerdo ni en desacuerdo.
La encuesta de Cadem fue realizada en forma telefónica entre el miércoles 23 y viernes 25 de septiembre, y tiene un margen de error de 3,4 puntos porcentuales, al 95% de confianza.
¿Antes o después del plebiscito?
Sobre el momento para realizar la reforma previsional hay una división importante. Lo anterior, considerando que el 45% cree que la reforma debería aprobarse “ahora, lo antes posible con un acuerdo entre el gobierno y el Congreso”. En tanto, el 52% cree que debería ser “después del plebiscito”.
Al desagregar este ítem, se observa que quienes son derecha prefieren que la reforma previsional se apruebe “ahora, lo antes posible”, mientras que las personas de izquierda en su mayoría prefiere que sea después del plebiscito. Las personas de centro están más divididas, pero aún así una mayoría prefiere que la reforma se apruebe ahora, mientras que en los independientes también hay bastante división, pero son más los que quieren que el proyecto previsional se apruebe después del plebiscito.
Al hacer un análisis por edad, los hombres prefieren que se apruebe la reforma después del plebiscito, y las mujeres están divididas. Por edad, solo los mayores de 55 años se inclinan más en que la reforma se apruebe ahora. En paralelo, por estrato socieconómico, solo quienes pertenencen al segmento bajo prefieren que la reforma se apruebe ahora, el resto opta para que sea después del plebiscito.
Lo cierto es que actualmente las negociaciones entre la oposición y el gobierno no han conseguido avanzar. De hecho, para este lunes la oposición decidió citar para hablar de su propuesta en pensiones en la Comisión de Trabajo del Senado, reunión que ocurrirá hoy entre 15.00 y 17.00, y a la cual fueron citados dos de los expertos que trabajaron en esta propuesta: los economistas Paula Benavides y Andras Uthoff.
El senador y presidente de esta instancia, Juan Pablo Letelier, afirmó que esta reunión ocurre porque “hace dos meses los senadores de oposición de la Comisión de Trabajo del Senado, le entregamos una propuesta para la reforma de pensiones, al gobierno. Sin embargo, durante este tiempo el Ejecutivo no ha dicho nada. Ello, a pesar del dato objetivo, que la propuesta de la oposición da mejores resultados para aumentar las pensiones de hoy, las pensiones de las mujeres, así como las de las futuras generaciones”.
Uno de los argumentos que en privado ha dado el oficialismo a la oposición para no ceder en que el 6% de cotización adicional vaya íntegro a cuentas individuales, es precisamente que las encuestas revelan que las personas prefieren que una parte o toda la cotización adicional vaya a sus cuentas individuales.