La Comisión Económica para América Latina y el Caribe (Cepal) proyectó un duro panorama económico para la región, en medio del avance del coronavirus.

Y Chile naturalmente no escapa a estos negativos pronósticos ya que calcula que el PIB caerá 4% este año, cifra considerablemente más pesimista que la proyección del Banco Central y más en línea con la del FMI.

Para la entidad, la caída en la demanda de productos chilenos desde China y Europa son las principales razones que explican esta adversa estimación.

“Las exportaciones regionales a China serían las que más disminuirían en 2020 (24,4%). Esto afectaría especialmente a los productos con eslabonamientos hacia adelante en las cadenas de valor en ese país (mineral de hierro, mineral de cobre, zinc, aluminio, soja, aceite de soja, entre otros). Los países más expuestos son la Argentina, el Brasil, Chile y el Perú, los mayores exportadores de la región de esos productos a China”, señala el informe “Dimensionar los efectos del COVID-19 para pensar en la reactivación”.

La Cepal también contextualiza su proyección para Chile en medio de las medidas que ha adoptado el gobierno para enfrentar la pandemia como en Plan Económico de Emergencia, que involucra recursos por más de 5,5% del PIB, y las garantías estatales para que empresas accedan a créditos a tasas preferenciales.

Las proyecciones de la Cepal van en línea con las del Fondo Monetario Internacional (FMI), que anticipa una contracción de la economía local en un 4,5% para el 2020. Mientras que, el Banco Central se mostró más optimista previendo una caída entre 1,5% y 2,5% y el Banco Mundial cree que la economía chilena caería un 3% para este año.

Por otro lado, Argentina y Ecuador lideran la caída del PIB proyectada para el 2020 con una baja de -6,5%; Brasil con -5,2%; Chile, Perú y Uruguay con -4%; Bolivia con -3%; Colombia -2,6% y Paraguay con -1,5%.

El rendimiento del región

La pandemia de coronavirus provocará una caída histórica del 5,3% de la economía de América Latina y el Caribe en 2020, que llevará a la peor crisis social de la región en décadas con millones de nuevos pobres y desempleados, dijo la Cepal

En diciembre, la Comisión Económica para América Latina y el Caribe (CEPAL) había estimado que la economía regional crecería un 1,3% este año ya en medio de una desaceleración generalizada. Para 2020, prevé que caerán 19 de las 20 economías latinoamericanas y 31 de las 33 de la región más el Caribe.

"La crisis que sufre la región en 2020, con una caída del PIB del 5,3%, será la peor en toda su historia", dijo la CEPAL. "Para encontrar una contracción de magnitud comparable hace falta retroceder hasta la Gran Depresión de 1930 (-5%) o más aún hasta 1914 (-4,9%)", añadió.

La caída regional dejará casi 30 millones más de pobres y profundizará los niveles de pobreza extrema, alertó el organismo, que también prevé que la tasa de desempleo se ubique en torno al 11,5%, un aumento de 3,4 puntos porcentuales respecto al nivel de 2019, lo que representa 37,7 millones de personas.

América Latina registra más de 100.000 casos de contagio de coronavirus, según un conteo de Reuters basado en cifras oficiales. El brote "será la causa de la mayor crisis económica y social de la región en décadas, con efectos muy negativos en el empleo, el combate a la pobreza y la reducción de la desigualdad", señaló.

La CEPAL también recordó que la región ya venía de un débil desempeño en los cinco años previos, con un crecimiento de 0,4% en el periodo 2014-2019, el menor desde la década de 1950.

El coronavirus golpea a los países latinoamericanos en momentos que tienen poco espacio para aumentar el gasto fiscal, por un mayor endeudamiento, creciente pago de intereses y limitados ingresos fiscales.

"En la coyuntura actual, los ingresos públicos se verán aún más afectados por la fuerte contracción de la actividad económica y los deprimidos precios de las materias primas", dijo.

La nueva estimación de la Cepal para la región está en línea con un reciente reporte del FMI, que en sus perspectivas mundiales para 2020 pronosticó que es probable que la economía de América Latina se contraiga un 5,2%.