En un 5,7% podría cerrar este año el registro de inflación, dato que tiene a los inversionistas locales preguntándose cómo capear la tormenta. O cómo ganar con ella.
Según el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el Índice de Precios al Consumidor (IPC) de agosto subió 0,4%, levemente por arriba del 0,3% que esperaba el mercado. Con ello, el acumulado del año llegó a 3,2% y en doce meses a 4,8%, su mayor registro desde enero de 2016, superando así el rango de tolerancia del BC de 2% a 4%. Ante las mayores presiones inflacionarias, el Banco Central duplicó la Tasa de Política Monetaria (TPM), dejándola en 1,5%.
En este escenario, la UF ya superó los $30.000, impactando a los préstamos denominados en esta moneda, como los hipotecarios, pero también acumulan alzas las tasas de los bonos en el mercado secundario y el costo de financiamiento de bancos y empresas. Eso sí, esta semana los instrumentos soberanos denominados en UF como en pesos mostraron caídas en sus tasas de interés, dijo Bice Inversiones en su último reporte de renta fija.
¿Qué hacer para cubrirse del riesgo? Marco Salín, gerente general de AGF Zurich, señala que “pareciera apropiado tomar posición en papeles de renta fija de corto plazo denominados en UF. A su vez, al tener un vencimiento cercano (corto plazo), no debieran estar tan afectos a los posibles aumentos de tasas de interés que se esperan en los próximos doce meses”.
En esa línea, Jorge García, gerente de inversiones de Nevasa, dice que “para exponerse a esta tendencia (inflacionaria) existen diferentes alternativas entre las que destacan, por simplicidad, los fondos mutuos con inversiones en UF, los de duración mas baja son los que nos ofrecen, proporcionalmente, una mayor exposición a esta idea de inversión, dado que al buscar otros mas largos, incurriremos también en un mayor grado, en riesgo de duración, en un contexto de normalización de la política monetaria por parte del Banco Central de Chile”.
De hecho, en su reporte Bice señala que “en términos de perspectivas de corto plazo, septiembre y octubre, poseen un alto nivel de inflación estacional”, razón por la cual “mantenemos nuestra recomendación de sobre ponderar instrumentos corporativos y denominados en UF. Estos, se verían favorecidos en un contexto de recuperación económica y perspectivas de inflación”.
Cartera en dólares
Si la UF sube, exponerse al sector de viviendas podría resultar una conclusión lógica, en un escenario además donde los precios continúan al alza.
Según datos de la Cámara Chilena de la Construcción, para el trimestre móvil finalizado en junio, la venta de viviendas en el Gran Santiago aumentó 149% interanual, mientras el precio de los departamentos aumentó 11,7% en doce meses y el de las casas 8,8%, la mayor alza anual desde julio de 2015 y desde febrero 2020, respectivamente.
Según Jorge García, de Nevasa, este tipo de activos podrían cubrirnos de la inflación, así como “invertir en fondos en dólares, que si bien tienen cierta correlación, también presentan riesgos adicionales que no quedarían del todo cubiertos y podrían entregar resultados diferentes a los esperados”.
Por su parte, Marco Salín añade que “los portafolios de activos alternativos, entre ellos, los fondos inmobiliarios de rentas residenciales aparecen como una buena opción dado que los arriendos se reajustan según IPC, por lo tanto, reflejan el aumento del costo de la vida y donde también han mostrado una importante capacidad de resiliencia en términos fundamentales (vacancias y valorización) en el escenario pandémico actual”.
Pero respecto de la exposición a otras monedas, apunta que “el tomar posición en activos que estén denominados en monedas duras podría ser en cierta medida una opción de diversificación en este escenario, pero siempre tomando en cuenta que hay factores de corto plazo y de bajo sustento fundamental que pueden generar volatilidades incómodas”.
Durante 2021, el precio del dolar ha subido 10,65%.