Este lunes, ante la comisión de Agricultura del Senado, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, expuso sobre los costos que ocasionó el sistema frontal que afectó a una amplia zona situada entre las regiones de Valparaíso y Biobío, en junio pasado. Según sus estimaciones, el daño económico causado por el evento climático alcanzó los US$759 millones.
De acuerdo con Marcel, el monto se descompone en US$628 millones en daño a la infraestructura pública y viviendas, equivalente al 72% del total. La afectación a la actividad e infraestructura agropecuaria impactó en torno a los US$131 millones (28% del total). De acuerdo con lo señalado por la autoridad, la zona afectada tiene una mayor concentración urbana y de producción agropecuaria con mayor inversión en tecnología, por lo tanto, el daño en infraestructura fue mayor que en los incendios de inicios de año.
Respecto al primer punto, el mayor costo se registra en rutas y caminos por US$280 millones y viviendas por US$222 millones; seguidos por obras de defensa fluvial y desembarque y encauzamiento de cauces naturales, por US$63 millones; puentes afectados por US$44 millones; puentes con reparación mayor por US$13 millones y finalmente los servicios sanitarios rurales afectados por US$7 millones.
Con respecto a la afectación a la actividad e infraestructura agropecuaria, el mayor costo lo concentran los canales extra prediales, con US$80 millones, producto del barro que los ha cubierto; las 7.912 hectáreas inundadas implican US$26 millones; y el resto se agrupa entre industria, maquinaria, el sector pecuario y colmenas afectadas, por US$25 millones.
“El costo fiscal por las inundaciones llegó a US$ 536 millones, de los cuales US$454 millones corresponderán a inversión del Ministerio de Obras Públicas para reconstrucción y US$80 millones en ayudas tempranas”, explicó el ministro Marcel.
El ministro de Hacienda destacó que el Estado ha comprometido más recursos proporcionalmente para atender diversas catástrofes en comparación con casos anteriores. Por ejemplo, los costos para enfrentar los incendios forestales de 2017 ascendieron a US$347 millones, mientras que en los incendios de este año alcanzaron los US$883 millones, siendo el costo fiscal de US$185 millones.
En el caso del terremoto de 2010, dijo Marcel, se utilizó el mecanismo del 2% constitucional para cubrir el costo total de US$30.000 millones. Desde entonces, señaló, se han implementado mecanismos de gestión financiera para atender emergencias en diferentes sectores y ministerios, permitiendo una respuesta más completa ante catástrofes de magnitud significativa.