Este miércoles el Banco Central divulgó los resultados de una encuesta sobre créditos bancarios del tercer trimestre de este año, la cual mostró que se ha debilitado la demanda por créditos hipotecarios, pero crecieron levemente los de consumo. Asimismo, precisó el sondeo que los bancos reportaron condiciones algo más flexibles en el otorgamiento de créditos para empresas pequeñas, medianas y grandes.
Por un lado, los estándares de otorgamiento de créditos de consumo fueron similares al trimestre anterior. En el caso de los créditos hipotecarios se mantienen los estándares más estrictos.
“En cuanto a la oferta de crédito para grandes empresas, se incrementa de 14 a 21% la fracción de instituciones que reporta condiciones más flexibles y disminuye desde 14 a 7% la proporción que informa estándares más exigentes respecto del trimestre anterior. Para las pequeñas y medianas empresas (PyMEs) se aprecian condiciones algo más flexibles. Así, el 17% de los bancos reporta que sus estándares de otorgamiento de crédito se flexibilizaron, sin instituciones que señalen condiciones más estrictas”, indicó el BC.
Las condiciones de oferta para empresas inmobiliarias y constructoras no muestran cambios significativos.
En cuanto a la demanda por créditos de consumo hubo mayor dinamismo, mientras que se debilitó la demanda por créditos hipotecarios.
“Algunas instituciones han dejado de reportar caídas en la demanda de financiamiento por parte de grandes empresas con respecto al trimestre anterior. En este segmento, la proporción de entidades que percibe una demanda más débil disminuye desde 36 a 14%, mientras que la fracción de bancos que reporta un mayor dinamismo se mantiene en 29%. Para el caso de las pymes, se pasó de un 36% de bancos que reportaban un debilitamiento en el trimestre anterior a un 8% que indica un fortalecimiento”, señaló.
La demanda por créditos de las empresas del sector inmobiliario y construcción se siguen contrayendo, según dijeron las instituciones encuestadas.
Esta encuesta tiene por objeto dar a conocer la percepción acerca de los cambios en los estándares de aprobación de nuevos créditos y en la demanda por financiamiento bancario, durante el trimestre para el cual se realiza la medición, y se efectúa a los ejecutivos responsables de las áreas de crédito de las instituciones bancarias en Chile.