En nuevo revés legislativo para el gobierno, la Comisión de Medio Ambiente de la Cámara de Diputados aprobó en particular y despachó a la Sala el proyecto que ley que establece la prohibición de la instalación y funcionamiento de centrales termoléctricas a carbón.

El proyecto, iniciado en una moción parlamentaria, establece que la medida comenzaría a regir para las plantas de generación termoeléctrica a carbón que tengan menos de 30 años de antigüedad el 31 de diciembre de 2025.

En la sesión el ministro de Energía, Juan Carlos Jobet, defendió nuevamente la opción del gobierno de generar un cierre programado de dichas unidades hasta el término total en 2040.

Cinco argumentos

Al respecto el ministro sostuvo que, si bien, el gobierno comparte la necesidad de cerrar las centrales a carbón ello no se puede hacer mediante un proyecto de ley y de manera inmediata. Para ello planteó 5 argumentos.

Éstos son el efecto que generaría la medida en el empleo, que según detalló alcanzaría a 13 mil puestos de trabajo, la vulnerabilidad en la que quedaría el sistema con posibilidad de enfrentar un eventual racionamiento en hora punta en el invierno y la posible alza en las tarifas eléctricas.

Asimismo mencionó el riesgo de demandas contra el Estado por compensación ante cierre forzado de centrales y el riesgo de inconstitucionalidad por el factor de expropiación.

En tanto, los parlamentarios que apoyaron la iniciativa señalaron que el sistema está preparado para absorber una salida de las centrales a carbón.