El dólar cerró con una fuerte caída, tras la publicación del IPC de EEUU, que se moderó en su medición interanual. Era el dato más esperado de la semana en los mercados.
La divisa estadounidense bajó $16,05 a $846,50.
“La inflación al consumidor en Estados Unidos subió 3,2% anual en julio, siendo inferior al 3,3% esperado. Con esto, la moneda norteamericana se debilita a nivel internacional, ya que la Fed no tendría mayores argumentos para subir la tasa de interés, impactando al tipo de cambio”, dijo Ricardo Bustamante de Capitaria.
Por otro lado, la inflación subyacente, que excluye alimentos frescos y energía, subió 0,2% en julio. El IPC subyacente interanual avanzó un 4,7% y se ubicó por debajo lo previsto.
El cobre por su parte, anotó un alza de 0,34% a US$ 3,821 la libra en la Bolsa de Metales de Londres.
“El cobre está teniendo una jornada positiva ante la posibilidad de que el gobierno chino intervenga después de los decepcionantes datos conocidos esta semana, donde se ve al gigante asiático en deflación. También se está aprovechando de la caída del dólar internacional antes del dato del IPC, lo que impulsa al metal rojo a recuperar terreno después de una semana en rojo”, señaló Daniel Seydevitz, analista de mercados de XTB Latam.
Los mercados globales reaccionaron con ganancias tras conocer el esperado dato inflacionario de EEUU.