El precio del dólar cerró con un fuerte aumento este lunes en línea con el avance de la divisa a nivel global y el retroceso de las bolsas internacionales luego que el dato de inflación dado a conocer el viernes en Estados Unidos elevara las expectativas de un alza superior a la esperada de la tasa de interés en Estados Unidos, y ante renovadas preocupaciones por el incremento de los casos de Covid-19 en China, lo que arrastraba a la baja al cobre.

La moneda estadounidense subió $16,9 a $862,89 registrando su mayor alza diaria desde el viernes cuando aumentó $20,61 y su nivel más alto desde el 12 de mayo, tras anotar a las 11.11 de la mañana un máximo de sesión de $871.

En las últimas tres sesiones la divisa acumula un incremento de $40,44.

De este modo el peso chileno era la octava moneda que más se debilitaba a nivel mundial en lo que va de la jornada.

Así, además, la divisa quedó a solo $13 de su máximo histórico de $876 anotado el 20 de diciembre de 2021.

“A nivel internacional, los inversionistas internalizan cada vez mayores alzas de tasas en Estados Unidos, especialmente tras conocer la mayor inflación en más de 40 años el pasado viernes, apoyando una fuerte caída de los activos ligados al ciclo económico y una fortaleza del dólar a nivel global”, dijo Ricardo Bustamante, jefe de estudios trading de Capitaria.

La Reserva Federal de Estados Unidos dará a conocer su decisión sobre las tasas de interés este miércoles junto con su actualización de proyecciones para la inflación y el crecimiento económico. Se espera que el banco central estadounidense eleve la tasa en 50 puntos, aunque aumentan las expectativas de que el incremento pueda ser de 75 puntos.

Por su parte Osvaldo Videlaz, analista senior de mercados de XTB Latam sostuvo que “si bien el tipo de cambio ha tenido una leve caída desde los máximos de sesión, teniendo como mínimo los $854 y máximos en los $871, el dólar mantiene una tendencia alcista considerando el dato de inflación que se conoció el día viernes”.

Agregó que “los datos inflacionarios causan temor en los operadores financieros, ya que en las próximas reuniones de julio y septiembre el aumento en las tasas efectivamente sería de 50 puntos base, sin descartar que pudiera ser de hasta 75 puntos”.

En cuanto a las perspectivas a corto plazo señaló que en la medidas que las tasas sigan incrementándose en Estados Unidos, el dólar podría seguir subiendo en el mercado local a niveles de $875 - $880.

Una tasa más alta en Estados Unidos eleva el retorno para los depósitos en la divisa en ese país, fortaleciéndola.

En efecto el dollar index, que mide la cotización de la divisa frente a una canasta de seis monedas líquidas, incluido el euro, subía 1,01% a 105,06 puntos.

Posible recesión

La Fed no ha subido la tasa de interés en 75 puntos desde 1994, y la perspectiva de un endurecimiento de la política monetaria superior al esperado elevaba el nerviosismo respecto a su impacto sobre el consumo y la actividad económica, lo que podría generar una recesión en Estados Unidos.

“La combinación del colapso de la confianza del consumidor, presiones de precios inesperadamente intensas y expectativas de activismo de la Fed están conspirando para crear un cóctel particularmente tóxico para los activos de riesgo”, dijeron estrategas de Rabobank citados por Bloomberg.

La reversión de la curva de rendimiento “resuena con la noción de que la necesidad de abordar las presiones de precios elevadas hará que la Fed lleve a la economía a la recesión”, añadieron.

Caída del cobre

El incremento del tipo de cambio también fue reforzado por el retroceso en el precio del cobre, la principal exportación del país.

La cotización al contado cerró con un descenso de 2,59% a US$4,21 la libra en la Bolsa de Metales de Londres, anotando su menor nivel desde el 25 de mayo y su caída más pronunciada desde el 12 del mismo mes.

Los futuros a tres meses del metal, en tanto, retrocedían 2,09% a US$4,21 la libra.

Ello, luego que a las preocupaciones sobre el crecimiento mundial se sumara la incertidumbre ante el aumento de casos de Covid-19 en China lo que podría afectar la recuperación en la demanda del mayor consumidor mundial de metales.