Lejos de las expectativas que tenían los mercados de EEUU, las medidas impulsadas por Donald Trump en sus primeros meses en la casa blanca ha derrumbado el precio de los activos norteamericanos. Sin embargo, la caída global del dólar ha dado un impulso al peso chileno, el que además se ha visto empujado por la subida constante del cobre, el cual pese a la amenaza de la imposición de aranceles, ha continuado empinándose.

Este lunes, la divisa estadounidense cerró en $919, lo que implicó un retroceso de $9,6 respecto al cierre del viernes. Este es su menor nivel desde principios de octubre de 2024.

Uno de los factores detrás de la baja del dólar, es que durante el fin de semana China anunció nuevas medidas para fortalecer su economía, enfocándose en el impulso del consumo interno y el desarrollo tecnológico.

Y en paralelo, el cobre continúa su escalada. El valor del metal al contado sube 11,97% en el año hasta los US$4,422 por libra en la Bolsa de Metales de Londres, sin embargo los precios futuros a tres meses llegan a los US$4,9, lo que ha entregado un soporte relevante al peso chileno, presionando a la baja el dólar.

En este escenario, varios economistas apuntan a algunos efectos que la baja del dólar podría tener sobre la economía real. Luis Felipe Alarcón, economista de EuroAmerica, indica que la caída del tipo de cambio “ciertamente quita presión sobre la inflación, de hecho las últimas bajas en los precios de los combustibles se deben en parte a ello, a lo que se suma la caída internacional del precio del petróleo. Y si la baja del dólar persisten, debiéramos ver traspasos hacia otros bienes importados”.

“A modo de ejemplo, posterior a la caída del dólar (desde los $1.000 que se vieron a principios de año), la expectativa de inflación para 2025 cayó de 4,5% a 4%, aproximadamente”.

Por su parte, Alejandro Fernández, socio de Gemines Consultores, sostiene que “la pregunta del millón es si esta tendencia es sostenida o no. La experiencia de los últimos años indica que estos avances en el peso tienden a revertirse. Con todo, en el corto plazo hay un efecto claro sobre los combustibles y puede darse en algunos otros bienes transables que frenen las tendencias inflacionarias”.

No obstante, señala que si bien la caída del dólar “constituye un alivio para el BC, no puede confiarse en una variable tan volátil e impredecible, por lo que debe mantenerse firme para reanclar las expectativas y asegurarse que la tendencia de la inflación es a la baja. Creo que debe mantener la TPM en 5% por varios meses más y dar un discurso duro en el IPOM (ratificar lo de la RPM de enero en que se dijo que si era necesario subiría la TPM)”.

¿Dólar bajo los $900?

En lo que va del ejercicio, el dólar cae $63,9 y la pregunta que ronda en el mercado, es hacia dónde se dirige. Gonzalo Muñoz, analista de mercados XTB Latam, señala que dado el contexto de EEUU, con decisiones económicas que han generado incertidumbre en los mercados por parte de Trump, y gravámenes que han golpeado a diversos países que han debilitado el dólar, “es completamente factible que el dólar en Chile alcance los $900 o incluso se ubique por debajo de ese nivel en ciertos momentos”.

No obstante, en su escenario central, Muñoz apunta a que es más “probable que el dólar en Chile se mantenga fluctuando entre los $900 y $930 en el corto plazo, con movimientos semanales dependiendo de la volatilidad del mercado.

Por su parte, Maximiliano Saldaña, analista de estudios de Capitaria, señala que " para alcanzar los $900, sería clave una tendencia alcista sostenida en el cobre y que la Fed adelante su recorte de tasas. Además, una posible reversión en los aranceles de Trump fortalecería aún más al peso y al mercado chileno, empujando al dólar a niveles más bajos. Si este escenario se cumple, el dólar podría llegar a $899, aunque para alcanzar estos niveles serían necesarios nuevos catalizadores favorables, ya que gran parte del impacto fundamental ya ha sido descontado por el mercado”.

“En el mediano y largo plazo, el dólar históricamente actúa como activo refugio, por lo que podría volver fácilmente a niveles de $960 si las condiciones globales se deterioran”, indica.

En tanto, Luis Felipe Alarcón indica que a fines de año su proyección sitúa al dólar en los $910.

El IPSA imparable

Mientras el dólar cae y el cobre sube, el IPSA anotó un nuevo récord histórico al subir 1,24% en la jornada hasta los 7.601,82 puntos.

“El IPSA está cerrando fuerte el día básicamente por tres razones. La primera, impulsada por los bancos, apuntando los buenos resultados conocidos la semana pasada y el anuncio probable de los dividendos que van a entregar estas mismas instituciones en los próximos días y semanas”, dijo Jorge Tolosa de Vector Capital.

José Agustín Cristi de Zurich, sostuvo que “en el plano local, seguimos viendo un IPSA bastante fuerte con alzas importantes en el sector minero y bancario, dado el mejor panorama económico externo y a las mejores perspectivas económicas internas debido al alza en el precio del cobre y la apreciación del tipo de cambio”.

En lo que va del ejercicio, el selectivo accionario se empina 11,91%, desacoplándose de las bolsas de EEUU. El índice S&P500 cae 3,51% mientras que el industrial Dow Jones y el tecnológico Nasdaq pierden 1,65% y 7,78%, respectivamente.