Julio Ponce practica la equitación desde hace años. Pero no es el único deporte que lo atrae. Como en el ejercicio de esa actividad ha sufrido varias caídas, Ponce ha combinado ese deporte con varios otros. Alguien lo vio alguna vez esquiando en Valle Nevado, pero aquello ha sido ocasional. Más permanente es la práctica del golf.
Por ello, y aunque es accionista del Club de Polo y Equitación San Cristóbal, Ponce quiso entrar como socio de otro club deportivo: el Sport Francés, ubicado en Vitacura, cerca de su residencia permanente. Pero ese intento no fue tan fácil como parecía. Para poder ingresar a ese club deportivo, necesitaba el patrocinio de dos socios del club. Así lo hizo y presentó una solicitud de incorporación auspiciada por su hermano, Eugenio Ponce, y uno de los abogados que lo ha representado en varias causas, el litigante Jorge Bofill.
Sin embargo, su ingreso no fue fácil. El club requiere antes que un comité de admisión recomiendo la aceptación o rechazo de un nuevo socio y, en este caso, su consejo fue denegar la petición. La solicitud debía ser finalmente aprobada o no por el directorio del club, el mismo de la inmobiliaria Sport Francais, sociedad registrada en la Comisión para el Mercado Financiero.
Una treintena de socios activó, entonces, una oposición formal al ingreso de Julio Ponce a la entidad, amparados en las varias polémicas pasadas que involucraron al expresidente de SQM. Enviaron una carta al directorio pidiendo rechazar el ingreso de Ponce y otro grupo, igual de numeroso, inició una suerte de campaña a favor de la incorporación del nuevo socio. Cercanos a Ponce advirtieron, incluso, que un eventual rechazo podría derivar en litigios por discriminación.
Todo se resolvió en el primer cuatrimestre de 2023, antes de la realización de la última junta de accionistas. El directorio aprobó por unanimidad -aunque alguien recuerda que faltó un director en esa ocasión- el ingreso de Julio Ponce al Sport Francais: convocados para decidir, concluyeron que un rechazo sin causales específicas era arbitrario y optaron por aceptar su incorporación. Además, Ponce ya asistía regularmente al Sport Francés a tomar clases de golf, lo que no requería tener la condición de socio. El directorio que aprobó al nuevo socio, y que se repetía en el club y la inmobiliaria, era presidido entonces por Iván Carrasco y participaban también Sebastián Obach, Desirée Soulodre, Elke Schwarz, Arturo Majlis, Alfredo Harz, Andrés Jabalquinto, Pablo Kuhlenthal Becker y Javier Trucco.
Los socios del Sport Francés también son accionistas de la inmobiliaria dueña de los activos. En la lista de accionistas de 2022 de esta última aparecía Eugenio Ponce, pero no su hermano mayor. El registro 2023 ya incorpora a Julio Ponce. Al cierre de 2022, la inmobiliaria, que entrega la operación del recinto al Club de Golf Sport Francés, tenía 1.895 accionistas.
Fundado en 1957, el club desarrolla en cerca de 30 hectáreas deportes como golf, tenis, natación, fútbol, hockey, además de operar un gimnasio y un restaurante. La cuota de incorporación para los nuevos asociados es variable, va de 750 a 2.000 UF, y la cuota social es de 7 UF al mes.