Eliodoro Matte Larraín cumplió 75 años en noviembre pasado. El histórico presidente de Empresas CMPC y del Centro de Estudios Públicos, CEP, ya no conserva ninguno de esos cargos, los que abandonó tras el escándalo de la colusión del papel tissue. Dejó casi todo y retuvo una única posición, menos visible, pero tanto o más simbólica: la presidencia de Forestal O’Higgins, la matriz a través de la cual el clan Matte, que hoy se divide en tres ramas familiares, participa en negocios como CMPC, Banco Bice, Colbún y Entel. Sin embargo, la continuidad de Matte en Forestal O’Higgins podría debatirse en los próximos meses.
Un protocolo familiar elaborado hace una década fijó algunas reglas que, entre otras cosas, establecen lo siguiente: los integrantes del grupo familiar no tendrán cargos ejecutivos en las empresas que controlan, pero sí serán activos en sus directorios; y los gerentes principales no podrán sobrepasar los 65 años y los directores, los 75 años. Y Eliodoro Matte, por años la cabeza más visible del grupo, cumplió esta última restricción.
El empresario dejó la presidencia de Empresas CMPC, lugar en el que trabajó durante 40 años, en abril de 2016. Había llegado en 1976 como director, luego asumió la gerencia general y más tarde, en 2002, la presidencia, en reemplazo del histórico Ernesto Ayala. Durante décadas, CMPC y Eliodoro Matte fueron casi sinónimos: durante su gestión, recordó el comunicado oficial de la forestal que oficializó su salida, la empresa multiplicó sus ventas por 40, pasando de US$ 120 millones a US$ 4.800 millones. Poco antes, en diciembre de 2015, Matte había dejado la presidencia del CEP, lugar en el que estuvo durante 28 años, desde 1987.
En ambos casos se adujeron motivos personales. Pero nadie dudó que había otras razones: en marzo de 2015, CMPC se autodenunció ante la Fiscalía Nacional Económica por haberse coludido con su competencia para fijar cuotas de mercado y precios por más de una década. El escándalo se hizo público en octubre, cuando la Fiscalía divulgó el caso. El golpe reputacional terminó esa vez con Matte, ingeniero civil industrial de la Universidad de Chile y MBA por la Universidad de Chicago, fuera de sus cargos principales. Menos de uno.
Qué es Forestal O’Higgins
CMPC se convirtió en el año de la pandemia en una compañía de historia centenaria. Formada en 1920, es el corazón y motor de los hoy diversificados negocios de la familia Matte. El origen de todo está en Eliodoro Eugenio Matte Ossa, quien comenzó a comprar acciones de la tradicional Papelera en los años sesenta y tomó el control durante la Unidad Popular. Falleció en 2000. Tuvo tres hijos: Patricia, la mayor, hoy de 77 años; Eliodoro, de 75; y Bernardo, quien en agosto del año pasado cumplió 65. Los tres hermanos Matte Larraín son las cabezas de la segunda generación y lideran, a su vez, las tres ramas familiares en las que se distribuye hoy el clan (ver infografía).
Los tres, y sus descendientes, confluyen en un vehículo principal de inversiones: Forestal O’Higgins, una sociedad anónima constituida en 1984 y que reporta en sus estatutos un capital social de $ 13.738 millones, menos de US$ 20 millones. Pero el poder de Forestal O’Higgins no está en el capital declarado, sino en las empresas que administra. Las memorias anuales de las empresas abiertas a Bolsa de la familia detallan que los Matte ejercen el control de casi todas ellas mediante “un pacto de control y actuación conjunta, formalizado entre Forestal O’Higgins S.A. y otras sociedades, que incluye limitaciones a la libre disposición de acciones”.
A través de ese pacto, los Matte tienen el control de CMPC, una de las mayores fabricantes de celulosa del mundo; el grupo financiero Bicecorp, matriz del banco Bice; la generadora eléctrica Colbún; y la empresa de telecomunicaciones Entel, donde comparten el control con las familias Fernández León, Hurtado Vicuña, Izquierdo Menéndez y Consorcio. Las cuatro empresas suman una capitalización bursátil que supera hoy los US$ 10 mil millones.
Forestal O’Higgins tiene un directorio de cinco miembros y las tres ramas están representadas. Su presidente es Eliodoro Matte Larraín y comparte ahí con su hermano Bernardo Matte y su sobrino Bernardo Larraín Matte, el segundo de los cuatro hijos de Patricia Matte, quien se ha convertido en el representante de esa familia. A ellos se suman dos directores externos: el empresario Álvaro Fischer, un ingeniero matemático que cofundó Resiter, y Felipe Joannon, exejecutivo del grupo Luksic.
En la propiedad de Forestal O’Higgins participan como accionistas las sociedades desde las que hoy cada rama dirige sus inversiones -Portoseguro, por la familia de Eliodoro Matte; Ecoterra, por Bernardo; y Tolhuaca, por Patricia- y una empresa constituida en 2010 por otras otras dos sociedades domiciliadas en Panama: Murray S.A. El gerente general de Forestal O’Higgins es Joaquín Izcué, un exejecutivo del Bice que asumió en 2017 en reemplazo de un histórico colaborador del conglomerado: Luis Felipe Gazitúa, quien fue gerente de la sociedad familiar por casi dos décadas y que en 2016 sucedió a Matte en la simbólica presidencia de Empresas CMPC.
Los estatutos de Forestal O’Higgins regulan el gobierno de esa sociedad, pero no establecen restricciones para la participación en los directorios. Esas políticas están contenidas en otro texto privado, un protocolo familiar formalizado en 2010. Ahí, confirma alguien que conoce ese documento, se establece el límite de los 75 años para participar en los directorios. Si aquella disposición interna se aplicará en este caso a Eliodoro Matte, es algo que aún no está resuelto. En todo caso, este año no corresponde renovación: el último cambio de directorio se hizo en abril de 2019 y los períodos de sus cinco integrantes expiran recién en 2022. Además, porque en el caso de Eliodoro Matte puede ocurrir alguna excepción, como ya ocurrió antes. Aunque los acuerdos familiares impedían el ingreso de las nuevas generaciones a cargos ejecutivos, a comienzos de la década pasada se hizo una excepción con Bernardo Larraín, quien fue gerente general de Colbún hasta 2012, fecha en que saltó a la presidencia de Colbún. Por lo mismo, interpreta una persona ligada al grupo, no son reglas taxativas e inamovibles: el espíritu de esas prohibiciones apunta más bien a las firmas operativas y no necesariamente a la sociedad holding. Y por último, son asuntos de familia que se resuelven como familia, agrega otra persona que conoce el texto. “Ese tema lo veremos en abril”, dicen.
Como sea, la transición en Forestal O’Higgins ya se inició. En abril de 2019, la sociedad reformó sus estatutos y entre otras cosas creó los cargos de directores suplentes, una condición que permite asistir a los directorios mensuales de la empresa -donde se discute la marcha de cada negocio operativo-, pero sin derecho a voto. Y en esa fecha se nombró a un miembro de cada rama. El suplente de Eliodoro padre es su primogénito Eliodoro Matte Capdevila; el de Bernardo Matte es Bernardo Matte Izquierdo; y el de Bernardo Larraín Matte, es su hermano Jorge Larraín Matte. Cada rama tiene así un titular y su reemplazo.
Diez primos
La tercera línea del árbol genealógico del grupo la componen hoy diez primos.
Los cuatro hijos de Patricia Matte y Gabriel Larraín Bunster son los mayores y tienen entre 45 y 55 años. La cabeza de ese subgrupo es Bernardo Larraín, quien reemplazó a su padre en Forestal O’Higgins en 2017. En diciembre anticipó que una vez que deje la presidencia de Sofofa, a fines de mayo, tras cuatro años de gestión, “lo más probable es que vuelva a las empresas con mucha más fuerza”. Una opción es regresar a la presidencia de Colbún, cargo que dejó en 2017 para asumir en la Sofofa. Hoy está en los directorios de Forestal O’Higgins, Minera Valparaíso y Colbún, y antes estuvo en el directorio de CMPC Tissue, la empresa que se coludió con su competencia, un caso por el que ha ofrecido disculpas y por el que se declaró “avergonzado”.
Su cuñado Juan Carlos Eyzaguirre, casado con Patricia, la mayor de los cuatro hermanos Larraín Matte, está en los directorios de Bicecorp y el banco Bice. Su otro cuñado, Andrés Echeverría, casado con Magdalena Matte, fue gerente general del Bice y hoy representa a la rama familiar en Entel y en CMPC Biopackaging. Por último, su hermano Jorge Gabriel (45 años), está en Empresas CMPC y en el directorio de dos filiales relevantes: Softys y CMPC Celulosa.
A sus 54 años, el actual timonel de la Sofofa es hoy el rostro de perfil más público del grupo Matte. En edad, está a mitad de camino entre sus tíos y sus seis primos, todos menores que él. Es, por ello, más cercano y parecido a la segunda que a la tercera generación. Algo así como la generación 2 y medio.
Eliodoro Matte Larraín, en tanto, lidera la familia Matte Capdevila y tiene tres hijos. Eliodoro, el mayor, es su suplente en Forestal O’Higgins. El segundo, Jorge Matte Capdevila, ingeniero comercial que este año cumple 40 años, es director de CMPC, Minera Valparaíso y Colbún, y está en CMPC Celulosa, CMPC Biopackaging y Softys.
Bernardo Matte Larraín es el más activo de la segunda generación y está en las mesas principales: además de Forestal O’Higgins, participa en CMPC, Colbún y Entel, y preside las mesas de Bice y Bicecorp. Su hijo mayor, el abogado Bernardo Matte Izquierdo (37 años), es su suplente en Forestal O’Higgins, es director de Minera Valparaíso, CMPC Celulosa, CMPC Biopackaging y Softys. Otro de sus hijos, el también abogado Francisco Matte, fue director de Colbún hasta agosto, cuando renunció para viajar al extranjero y cedió su posición a su padre. A sus 32 años, es el menor de los diez primos que integran la tercera generación.