El dólar sube tras comenzar el día sin un rumbo claro en la última jornada de la semana y tras la pausa de este jueves por motivo del feriado en Chile.
Al cierre del día, el dólar subió $6,01 respecto al cierre de este miércoles, día donde cerró al alza, y llegó a un valor de $938,71 la unidad.
“En el panorama nacional, ha crecido la expectativa de que el Banco Central de Chile retome los recortes de tasas de interés, luego de que se conociera un ajuste en la actividad económica reflejado en las expectativas económicas de esta semana”, comentó Ignacio Mieres, jefe de análisis XTB Latam.
Mientras que, en el balance de la semana, la divisa registró ganancias por $6,38 y cayó tras dos semanas a la baja, donde bajó $20,04.
De cara a la próxima semana, Rodrigo Lama, chief business officer de Global66, comentó que, “debemos estar atentos al tono en las palabras del presidente de la FED, pues existen expectativas de una intervención de mayor envergadura y frecuencia, a raíz de preocupaciones ante una eventual recesión”.
“Una interpretación positiva podría llevar al dólar a buscar los próximos niveles de soporte técnico en $920, y de confirmarse esta ruptura, podría ir a buscar el nivel psicológico de $900″, agregó.
Respecto a lo ocurrido en la jornada pasada, cuando el mercado cambiario local no abrió, Ricardo Bustamante, subgerente de estudios de Capitaria, comentó que " se conocieron interesantes cifras del comercio minorista en Estados Unidos, que sorprendieron positivamente y apoyaron avances del billete verde a nivel global, aunque hoy se observa cierta corrección desde los últimos máximos”.
“Por otra parte, el precio del cobre ayer avanzó en su cotización futura, devolviendo parte de los avances en la presente jornada, a pesar de haberse revelado datos económicos que decepcionaron en el país oriental”, agregó.
En tanto, durante esta jornada, el peso chileno pierde fuerza pese a que el cobre se recuperó de su caída inicial. Los precios del cobre cayeron el viernes debido a que el grupo BHP dijo que había llegado a un acuerdo con un sindicato para resolver una huelga en su mina de cobre Escondida en Chile, aliviando preocupaciones sobre el suministro global, aunque el sindicato declinó hacer comentarios.
Escondida es la mina de cobre más grande del mundo y representó casi el 5% del suministro global en 2023. El domingo se podría firmar un acuerdo salarial en la mina si los miembros del sindicato dan su aprobación.
Del lado de la demanda, las perspectivas para el principal consumidor de metales, China, siguen siendo desafiantes, lo que crea riesgos a la baja para el cobre, dijo Ewa Manthey, analista de materias primas de ING.
“La prolongada crisis en el mercado inmobiliario no muestra señales de tocar fondo aún y creemos que esto seguirá pesando sobre los precios del cobre”, dijo Manthey, refiriéndose al sector de la construcción, que es un importante consumidor de cobre.
“Y no es sólo la débil demanda en China la que ha estado pesando sobre los precios del cobre; el sector manufacturero luce débil a nivel global, lo que indica una lenta recuperación de la demanda de cobre y otros metales industriales”, agregó.
La atención del mercado también se centró en el continuo crecimiento de las existencias de cobre en los depósitos registrados en la Bolsa de Metales de Londres, que casi se han triplicado en los últimos tres meses, en parte debido al aumento de la producción en China.
Los datos diarios de LME del viernes mostraron un aumento de 1.600 toneladas a 309.050 toneladas, el nivel más alto en casi cinco años. Los inventarios de cobre en los almacenes monitoreados por la Bolsa de Futuros de Shanghai (SHFE) cayeron un 8,4% esta semana.
Sin embargo, los metales recibieron apoyo de la debilidad de la moneda estadounidense, que hace que las materias primas cotizadas en dólares sean más atractivas para los compradores que poseen otras divisas. El índice del dólar cayó el viernes bajo la presión de los decepcionantes datos sobre la vivienda en Estados Unidos.
Ante este contexto, el valor del metal subía un 0,44% a US$ 4,15 en Comex. Mientras que, el valor al contado del cobre cayó un 0,79% a US$4,05 la libra en la Bolsa de Metales de Londres.
Mientras que, el dólar en el mundo caía en medio de las decepcionantes cifras del sector inmobiliario estadounidense, mientras los inversionistas analizan los datos económicos para calibrar el apetito de la Reserva Federal por recortar las tasas de interés.
La construcción de viviendas unifamiliares en Estados Unidos declinó en julio, ya que el aumento de las tasas hipotecarias y de los precios de la vivienda mantuvo al margen a los posibles compradores, lo que sugiere que el mercado sigue deprimido al comienzo del tercer trimestre.
“Los decepcionantes datos de la vivienda de hoy volvieron a presionar al dólar, cuyo índice sigue rondando el nivel de 103 unidades”, dijo Uto Shinohara, de Mesirow.
“Los movimientos del dólar siguen dependiendo de los datos y es probable que se haga más hincapié en el empleo y la salud de la economía y menos en la inflación, con el IPC general cruzando por debajo del 3% en la última lectura. El mercado espera nuevos mensajes de la Fed en Jackson Hole la semana que viene”, agregó.
En tanto, las monedas sensibles al riesgo, como la libra esterlina, se mantenían firmes, ya que la mejora de las perspectivas económicas impulsaba un repunte de las acciones.
Datos publicados el jueves mostraron que el número de estadounidenses que presentaron nuevas solicitudes de beneficios por desempleo cayó a un mínimo de un mes la semana pasada, mientras que las ventas minoristas aumentaron al máximo en un año y medio en julio, frustrando las expectativas de que la Fed recorte las tasas en 50 puntos básicos el próximo mes.
Así, el índice dólar, que compara al billete verde con una cesta de seis destacadas monedas, restaba un 0,52%, a 102,44 unidades.