El dólar en Chile cerró la última jornada de la semana al alza y terminado con su racha de pérdidas y se alejó de los $900 tras buscar caer de este soporte a principios de junio y cerrar por debajo de este a finales de mayo. Mientras que, en el balance semanal, la divisa subió.
Al cierre del día, el dólar subió $17 respecto al cierre de ayer en la Bolsa Electrónica de Chile (Bec) y llega a un valor de $934,10 la unidad, su mayor nivel desde inicios de mayo de este año. Así, terminó con una racha de dos jornadas consecutivas a la baja, donde restó $5,05.
No obstante, la divisa alcanzó un máximo de $934,40 al cierre del día y luego moderó en algo su avance.
Mientras que, en la semana, la divisa registró una alza luego que en la semana anterior la divisa bajó $2,15. En estos cinco días el dólar subió $16,25.
“Todo esto se ve marcado por la valorización del dólar internacional, que sigue interiorizando la posibilidad que solo veamos dos recortes de tasas de interés este año 2024 por parte de la Reserva Federal”, comentó Felipe Sepúlveda, analista jefe de Admirals.
Además, Sepúlveda apuntó a las señales que pueda entregar el Banco Central de Chile: “Podremos saber si continuaran bajando tasas de interés o no. Dependiendo de eso podríamos ver al tipo de cambio romper la barrera de los $935 con siguiente objetivo a los $950, en caso contrario, si vemos que el Central decide mantener la tasa, quizás volver a ver al precio del dólar en Chile entre los $900 y los $915″.
El peso chileno cedió terreno en medio de la estabilidad del cobre, uno de sus principales soportes. Sin embargo, el valor del metal se encontraba presionado por la firmeza del dólar y el aumento de los inventarios, que ponía de relieve un excedente de oferta.
Un dólar más fuerte pesaba sobre los metales, encareciendo las materias primas cotizadas en la divisa estadounidense para los compradores que utilizan otras monedas.
“En los metales, el apetito por el riesgo se ha desvanecido recientemente, pero eso era necesario después de un movimiento muy fuerte que no estaba justificado en ese momento”, dijo Ole Hansen, del Saxo Bank en Copenhague.
El cobre ha perdido un 12% desde que tocó un máximo histórico de US$ 11.104,50 (US$ 5,04 la libra) el mes pasado, tras un repunte impulsado por especuladores y fondos de inversión.
En tanto, los inventarios de cobre en los almacenes registrados en la Bolsa de Metales de Londres han aumentado un 28% en el último mes, hasta su nivel más alto en cuatro meses.
Ante este contexto, el valor a tres meses del cobre subía 0,51% a US$ 4,50 la libra en la principal bolsa de futuros Comex. Mientras que, el valor al contado del cobre cayó un 0,85% a US$ 4,37 la libra en la Bolsa de Metales de Londres.
“Los movimientos del futuro del cobre repuntan desde los últimos mínimos; sin embargo, no generan mayor impacto en el tipo de cambio que está más influenciado por la apreciación del dólar a nivel global”, comentó Rafael Weber, analista de estudios de Capitaria.
El dólar sube por Europa
Mientras que, el dólar en el mundo ganaba fuerza en medio de las turbulencias en Europa. Así, el euro se encaminaba el viernes hacia su mayor caída semanal en dos meses frente al dólar, debido a la agitación política en Francia.
Los mercados franceses sufrieron otra brutal liquidación el viernes, ya que la incertidumbre política desató el mayor aumento semanal de la prima que los inversionistas exigen para mantener la deuda pública francesa desde 2011 y las acciones bancarias se desplomaron.
El ministro de Finanzas del país, Bruno Le Maire, advirtió que la segunda mayor economía de la zona euro se enfrentaba al riesgo de una crisis financiera si la extrema derecha, o la izquierda, ganaban las elecciones parlamentarias en las próximas semanas.
Por su parte, el yen se recuperó tras caer a mínimos de un mes después de la decisión del Banco de Japón de mantener las tasas de interés estables y reanudar la compra de bonos.
El Banco de Japón sorprendió a los mercados con su decisión de seguir comprando deuda pública al ritmo actual y de presentar los detalles de su plan de reducción en la reunión de política monetaria de julio.
El gobernador del Banco de Japón, Kazuo Ueda, declaró en una reunión informativa que el banco central estaba “prestando mucha atención” al impacto de la debilidad del yen en la inflación, y añadió que una subida de tasas en julio era una posibilidad en función de los datos económicos.
Mientras que, los datos de empleo de Estados Unidos del jueves aumentaron las apuestas a que la Reserva Federal podría iniciar su ciclo de flexibilización en septiembre, pero los analistas dijeron que la debilidad del euro era el principal factor que impulsaba los mercados de divisas esta semana.
Ante este contexto, el dólar frente a una canasta de las divisas más importantes del mundo subía un 0,30% a 105.51 puntos.