La Empresa Nacional del Petróleo (ENAP) reportó una importante mejora en sus estados financieros correspondientes al tercer trimestre del año. Las utilidades llegaron a los $90 mil millones (US$ 109,9 millones), lo que se compara con las pérdidas por $103 mil millones (US$ 127,2 millones) en igual periodo del año anterior.

Se trata de una mejora equivalente a $190 mil millones (US$ 237,1 millones).

Los ingresos de la petrolera llegaron a US$ 5.372 millones entre enero y septiembre, esto es un fuerte aumento de 48,4% en doce meses.

La compañía atribuyó esta recuperación al plan de eficiencia, productividad, ahorro y control de inversiones e incorporación de tecnología digital, elaborado por el Directorio y la actual Administración, y puesto en marcha a fines del 2018.

“El tercer trimestre, fue muy desafiante para ENAP, tuvimos que reaccionar rápidamente a un fuerte incremento de la demanda, la cual superó los niveles de 2019, cuando no existía la pandemia. Este incremento excedió las proyecciones del mercado, obligándonos a ajustar rápidamente toda nuestra logística y producción de las refinerías, de manera de no producir desabastecimiento en el país.”, señaló el Gerente General de ENAP, Andrés Roccatagliata.

Andrés Roccatagliata, gerente general de Enap

En materia de posición financiera, la estatal destacó su proceso de contención de costos y priorización de inversiones, que le han permitido reducir la deuda en $ 570 mil millones (US$ 700 millones) desde su nivel más alto y disminuir anualmente en más de $ 40 mil millones (US$ 50 millones) el pago de intereses.

“La compañía está en muy buen pie desde el punto de vista de sus finanzas, lo que le permite enfrentar los próximos dos años prácticamente sin vencimientos. Asimismo, ha logrado bajar la tasa de interés y disminuir su deuda”, dijo el ejecutivo en un comunicado.

Complicado cierre de 2021

Pese a estos buenos números, Enap anticipa un complicado cierre de año debido al paro de mantención de Refinería Aconcagua, la que abastece a aproximadamente un 30% de los combustibles que se consumen en el país.

“Para nosotros es un gran impacto desde el punto de vista de los resultados, porque significa bajar la producción de la refinación en forma muy importante, lo que conlleva a un fuerte incremento en los costos, producto de esta crítica pero necesaria actividad, la que además debemos ejecutar con los más altos estándares de seguridad para las personas”, afirmó Roccatagliata

En términos de demanda, el ejecutivo explicó que “estimamos se mantengan los niveles actuales en la medida que no exista un rebrote de la pandemia, aunque aún seguirá baja la demanda de kerojet, dado que la actividad aérea no recupera los niveles de prepandemia”.