Las personas rechazaron con claridad la propuesta de nueva Constitución elaborada por el Consejo Constitucional, pero fue la clase media y alta la que más mostró en mayor medida su descontento con la segunda propuesta de texto constitucional, según reveló un estudio de Faro UDD, un centro de investigación multidisciplinario de la Universidad del Desarrollo.
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El sondeo muestra que la opción En contra encuentra más respaldo los mayores ingresos y va bajando su apoyo con base en que se va observando los grupos de menores recursos.
Con base en los resultados preliminares ya representativos de la participación final, Faro UDD segmentó la votación con base en los ingresos de las comunas a lo largo de Chile. De esta forma, el sondeo resaltó que la zona de ingresos altos, un 43,0% votó por la opción A favor frente al 57% que se inclinó por el En contra. No obstante. el sondeo matiza que, “a nivel general, las comunas con mayores ingresos presentaron menores tasas promedio de participación que el resto del país.
En tanto, la clase media alta la distribución fue de 44,8% por el A favor y 55,2% con el En contra, un escenario que reflejó el resultado a nivel nacional: 55,76% por el En contra y 44,24% por el A favor. “La opción “En Contra” encontró su mayor tasa promedio de apoyo electoral en comunas de clase media y urbanas”, agregó.
La clase media también mostró resultados similares, con una tendencia de 54,7% por rechazar la última propuesta de nueva Constitución y un 45,3% optó por aprobar el texto propuesto.
Sin embargo, cuando el sondeo de la UDD midió a comunas de menores ingresos, el resultado del plebiscito se estrechó entre ambas opciones y en las zonas más pobres se revirtió.
“El quintil de comunas con menores ingresos medianos en el país presentaron una tasa promedio de apoyo a la alternativa “En contra” menor al de todos los otros grupos del territorio”, comentó el estudio.
En las comunas calificadas de clase media bajo el A favor registró un 49,9% frente al 50,1% del En contra. Mientras que, el primer desacople claro del resultado total se dio en las comunas de ingresos bajo, donde el A favor ganó con un 54,5% frente al 45,5% que se inclinó por el En contra.
“Ello es coherente con los datos obtenidos desde las comunas con mayores niveles de ruralidad (que son a su vez las con menores ingresos medianos del país)”, añadió el estudio.
De esta forma, por nivel de ruralidad, los datos muestran importantes diferencias entre comunas urbanas y rurales. Así, en el 25% de comunas con mayor nivel de ruralidad la opción A favor encontró un mayor nivel de apoyo promedio que en las de bajo nivel de ruralidad.
En concreto, en la alta ruralidad la opción A favor ganó con un 52% versus un 48%; la baja ruralidad ganó el En contra con 59,9% frente el 40,1%; en la media ruralidad ganó el rechazó al texto con un 53,8%; y en el segmento urbano el sondeo reveló un casi empate, pero con una victoria del En contra: 50,9% vs 49,1%.
Mientras que, por nivel de pobreza comunal, el 20% de las comunas más pobres del país presentaron una tasa de apoyo promedio por la opción A favor superior a todo el resto del país, alcanzado 8 puntos sobre la opción “En contra”. Esto va en línea con lo que se observó en comunas rurales y de menores ingresos medianos.
En la presencia de pobreza alta el A favor se ubicó en el 54% vs un 46% y para la pobreza media alta el A favor se impuso en un 50,3% contra un 49,7%. En tanto, por el otro lado, en relación a los grupos de pobreza baja el A favor logró un 44,1% frente al 55,9% del En contra.
