Un espontáneo y, por momentos, festivo Federico Sturzenegger concentró la atención de más de un centenar de personas reunidas este viernes en el seminario “Desregulación y transformación del Estado: lecciones de Argentina de Milei y propuestas para Chile”, organizado por el Centro de Estudios Públicos(CEP), en el que participó también la candidata de oposición, Evelyn Matthei.
“La regulación es la política más procorrupción que hay... y es también antiemprendimiento y antipyme”, dijo el ministro de Desregulación y Transformación del Estado de Argentina, mientras Matthei inclinaba su cabeza en señal de aprobación.
El llamado ministro de la “motosierra”, por su tarea de desburocratizar la economía trasandina, recordó el proceso de diseño de este plan impulsado por el Presidente argentino Javier Milei.”Nosotros empezamos a trabajar dos años antes de que Milei llegara a la presidencia”, reconoció Sturzenegger, quien entonces había elaborado el proyecto de “motosierra” para la campaña de la otra candidata de oposición, Patricia Bullrich.
“Cuando Patricia perdió la primera vuelta me dijo: ‘Este proyecto va a ver la luz con Javier (Milei)’”, rememoró el economista del MIT.
Al presentar el plan a Milei y “palpar” la reacción del libertario, Sturzenegger intentó describir con humor el momento: “Javier (Milei) gemía con si estuviera teniendo sexo”, dijo Sturzenegger, generando una risotada de la audiencia.
El ministro, de gran cercanía con varios economistas chilenos que también estudiaron en el MIT de Estados Unidos, habló de los momentos de gloria de la economía argentina y del proceso de deterioro económico posterior.
“La Argentina ha sido una calamidad en sus políticas económicas durante los últimos 50 años. Dejó de crecer en los ‘70. Cuando nací era más rica que España y tenía 5% de pobres. Hoy es un país incomparable. Cuando Javier Milei asumió la presidencia había 50% de pobres”, sostuvo el economista.
Durante toda la exposición, Sturzenegger destacó la importancia que tuvo y tiene para el gobierno libertario el manejo de las finanzas públicas.
“Milei heredó un déficit fiscal de 5% del PIB y en un mes alcanzó el equilibrio fiscal... Argentina es hoy el único país de Sudamérica con superávit fiscal”, indicó el ministro, generando el aplauso de la audiencia.
Repasó también algunas de las políticas implementadas por el gobierno trasandino en su primer año. Además de apuntar al inmediato freno a las transferencias discrecionales a las provincias, destacó el recorte de 42 mil empleados públicos del gobierno central durante el primer año.
“Hay como una verdad revelada y es que una corrección fiscal es políticamente costosa, pero la gente está cansada de pagar impuestos a un Estado que no le da nada. Teníamos una militancia rentable, los ñoquis, entonces cerrar eso es popular, la gente ama esa corrección fiscal que hemos ilustrado en el fenómeno de la motosierra”, se explayó.
El término “ñoqui” se atribuye despectivamente en Argentina a las personas que tienen un contrato en el Estado y que reciben un sueldo por ello, pero que no trabajan. Aparecen en el trabajo sólo el 29 de cada mes (día tradicional de comer ñoquis) para cobrar.
“Va a ser imposible para mí ver al gobierno de la Argentina con un déficit fiscal nunca, porque si nos acercáramos a eso, el Presidente Milei va a tomar las medidas para corregirlo y si no fuera el caso, habría sido decapitado”, exclamó en tono de broma el economista.
El ministro, asimismo, habló del sistema de castas en Argentina, un término muy usado por Milei en la campaña presidencial. “Los líderes sindicales son las mismas personas que hace 40 años, al igual que los líderes empresariales ... Hay una estructura de poder muy estable, que ha armado una arquitectura legal para generar rentas a favor de esa estructura”, afirmó.
“El sistema de castas tiene un gran gestor político que es el partido peronista (grupo político de soporte del kirchnerismo). El partido peronista es el partido de las castas, es el del statusquo, de los intereses creados”, añadió Sturzenegger.
Por último, el economista aseguró que hoy un equipo de su ministerio está trabajando en lo que sería la segunda parte del plan: “La motosierra 2.0″.
“Trabajar con Javier (Milei) es la experiencia más alucinante que tuve en mi vida. Es una persona que apoya y está bancando lo que uno hace. Pero faltan muchas batallas todavía por delante, porque para estar seguros de que la Argentina cambió, tenemos que terminar de desarticular la estructura de poder que tantos años nos ha tenido en el triángulo de las Bermudas. La sociedad está lista, acompaña, Javier es una persona extraordinaria para llevar adelante esta tarea”, concluyó el ministro trasandino, quien realzó la misión de Milei de correr el cerco cultural de los valores de la libertad.