El Fondo Monetario Internacional (FMI) recortó nuevamente el martes las previsiones de crecimiento global, advirtiendo que los riesgos a la baja de la alta inflación y la guerra de Ucrania se están materializando y podrían llevar a la economía mundial al borde de la recesión si no se controlan.
El crecimiento del PIB real mundial se desacelerará a 3,2% en 2022 desde el pronóstico de 3,6% de abril, dijo el FMI en una actualización de su informe Perspectivas de la Economía Mundial. Agregó que el PIB global se contrajo en el segundo trimestre debido a las recesiones en China y Rusia.
El FMI recortó su pronóstico de crecimiento para 2023 al 2,9% desde la estimación de abril de 3,6%.
El crecimiento mundial había repuntado en 2021 al 6,1% después de que la pandemia de COVID-19 aplastara la producción mundial en el año anterior con una contracción del 3,1%.
“La perspectiva se ha oscurecido significativamente desde abril. El mundo pronto podría estar al borde de una recesión global, solo dos años después de la última”, dijo el economista jefe del FMI, Pierre-Olivier Gourinchas, en un comunicado.
Embargo de gas ruso
El FMI dijo que su nueva previsión es “extraordinariamente incierta” y está sujeta a los riesgos a la baja de la guerra de Rusia en Ucrania, que está elevando los precios de la energía y los alimentos. Esto exacerbaría la inflación e incrustaría expectativas inflacionarias a más largo plazo que provocarían un mayor endurecimiento de la política monetaria.
Bajo un escenario alternativo “plausible” que incluye un corte total de la oferta de gas ruso a Europa para fin de año y una caída adicional del 30% en las exportaciones de petróleo ruso, el FMI dijo que el crecimiento global se desaceleraría a 2,6% en 2022 y 2% en 2023, con un crecimiento prácticamente nulo en Europa y Estados Unidos el próximo año.
El crecimiento global ha caído por debajo del 2% solo cinco veces desde 1970, dijo el FMI, incluida la recesión de COVID-19 de 2020.
La entidad sostuvo que ahora espera que la tasa de inflación de 2022 en las economías avanzadas alcance el 6,6%, frente al 5,7% de las previsiones de abril, y agregó que se mantendría elevada durante más tiempo de lo previsto anteriormente.
Ahora se espera que la inflación en los países emergentes y en desarrollo alcance el 9,5% en 2022, frente al 8,7% de abril.
“La inflación en los niveles actuales representa un riesgo claro para la estabilidad macroeconómica actual y futura”, dijo Gourinchas.
El endurecimiento de la política monetaria afectará a la economía el próximo año, ralentizando el crecimiento y presionando a los países emergentes, pero retrasar este proceso “solo exacerbará las dificultades”, dijo, y agregó que los bancos centrales “deberían mantener el rumbo a que se controle la inflación”.
EEUU y China
Para Estados Unidos, el FMI confirmó sus pronósticos del 12 de julio de un crecimiento del 2,3% en 2022 y un 1,0% para el próximo año, que había recortado dos veces desde abril debido a la desaceleración de la demanda.
El Fondo recortó drásticamente el pronóstico de crecimiento del PIB de China para 2022 a 3,3% desde el 4,4% en abril, por los brotes de COVID-19 y los confinamientos generalizados en las principales ciudades que han reducido la producción y empeorado las interrupciones de la cadena de oferta global.
El FMI también recortó su perspectiva de crecimiento de la eurozona para 2022 al 2,6% desde el 2,8% en abril, lo que refleja los efectos de contagio inflacionarios de la guerra en Ucrania.
Sin embargo, las previsiones se redujeron más profundamente para algunos países más expuestos a la guerra, incluida Alemania, cuya perspectiva de crecimiento para 2022 se redujo al 1,2% desde el 2,1% de abril.
En tanto, Italia vio un alza en su perspectiva de crecimiento para 2022 debido a mejores perspectivas para el turismo y la actividad industrial. Sin embargo, el FMI dijo la semana pasada que Italia podría sufrir una profunda recesión bajo el embargo de gas ruso.
Se espera que la economía de Rusia se contraiga un 6,0% en 2022 debido al endurecimiento de las sanciones occidentales, y caiga un 3,5% adicional en 2023, dijo el FMI. Estimó que la economía de Ucrania se reducirá en un 45% debido a la guerra, pero sostuvo que la estimación viene con una incertidumbre extrema.
America Latina y Chile
El Fondo Monetario Internacional (FMI) revisó al alza el martes su previsión para el crecimiento de las economías de América Latina, a diferencia de sus pronósticos para el desempeño global, debido a una fortaleza mayor a la esperada de los grandes motores de la región, Brasil y México.
En una actualización parcial de su reporte Perspectivas de la Economía Mundial, el Fondo con sede en Washington indicó que ahora espera que las economías latinoamericanas en su conjunto crezcan un 3%, un aumento de 0,5 puntos porcentuales respecto de su estimación de abril.
Sin embargo, el panorama se complica el próximo año, debido a lo que se espera sea un fuerte desaceleración de Estados Unidos y China, y a los efectos de condiciones monetarias locales más duras para enfrentar la inflación.
Para el 2023, el FMI recortó la perspectiva de crecimiento del PIB de la región 0,5 puntos porcentuales a un 2%.
“Si bien las revisiones son en su mayoría negativas para las economías avanzadas, la exposiciones divergentes a los acontecimientos que se están desarrollando implican una perspectiva más dispar para los mercados emergentes y las economías en desarrollo”, dijo el FMI.
En el caso de Brasil, el organismo elevó su proyección en 0,9 puntos porcentuales y ahora estima una expansión del PIB de 1,7% para este año, si bien en 2023 el crecimiento de la mayor economía latinoamericana se ralentizará a un 1,1%.
La estimación para México también aumentó, alentada una sólida actividad en los primeros meses del año. El reporte proyectó un crecimiento económico de un 2,4% en 2022, un alza de 0,4 puntos porcentuales respecto de abril, pero un avance de un 1,2% en 2023, con una baja sustancial de 1,3 puntos porcentuales desde el último informe.
Analistas locales esperan que la economía mexicana muestre un avance por tercer trimestre consecutivo cuando se entreguen las cifras sobre el desempeño del PIB entre abril y junio más tarde esta semana, aunque el impulso estaría perdiendo fuelle debido a presiones externas, como la guerra de Ucrania y los confinamientos en China.
Referencia a Chile
El Informe del FMI dedica una breve, pero positiva mención a Chile ante la previsión al alza del crecimiento del conjunto de las economías de América Latina para 2022.
El aumento de 0,5 puntos en la estimación de América Latina “es el resultado de una recuperación más robusta en las economías más grandes (Brasil, México, Colombia, Chile”, dice el estudio.
Por ahora, el FMI solamente, para America Latina, aborda en particular la proyecciones de crecimiento para Brasil y México.