El deterioro de la situación económica y la crisis que viven las isapres, está motivando a muchas personas a cambiarse del sector asegurador privado al Fondo Nacional de Salud (Fonasa), un escenario que el director del organismo público, Camilo Cid, dijo estar preparado para afrontar en caso de que persista, y agregó que están trabajando por medio de la ley corta de isapres que elabora el gobierno, para que se pueda ofrecer un plan de Fonasa asociado a una oferta de seguros complementarios, que permita al nuevo afiliado una experiencia similar en la atención.
“Nosotros estamos planteando poder intermediar, entre las personas provenientes de isapres, un aseguramiento complementario de copago para que estas personas, junto con mantener la atención en clínicas que hoy visitan, puedan tener una cobertura financiera similar”, explicó Cid, en entrevista con Radio ADN.
Desde Fonasa defienden la propuesta explicando que tras un estudio de seguros complementarios, lo planteado está en línea con la actual oferta del mercado.
“La gente que viene del sistema de isapres está acostumbrada a otras coberturas y por eso hemos generado este plan que va en la ley corta. Nos preocupa lo que está ocurriendo (con las isapres), pero también tenemos tranquilidad de que podamos estar respondiendo de buena forma”, agregó Cid.
Además, y ante la crisis que viven las isapres, apuntó que “en el diagnóstico que nosotros tenemos no esperamos el colapso completo que se anuncia en el sistema (de isapres). Lo que sí esperamos es un crecimiento importante de la migración (hacia Fonasa), como ha ocurrido en el año pasado”.
Cid también contextualizó que la llegada de usuarios de isapres se da en un escenario en que estos buscan seguir atendiéndose en el sistema privado, por lo que no se tendría que estimar una carga excesiva para la red pública. “Lo que pasa es que la intermediación que hacen las isapres la dejarían de hacer y la haría Fonasa”, agregó.
Sin embargo, el director también describió que, pese a la amplia cobertura de Fonasa con los privados, todavía existen problemas ante la falta de convenios con una parte de esta oferta, como lo son las grandes clínicas de la Región Metropolitana.
Sobre cómo esta crisis de las isapres puede repercutir en las clínicas, que alertan sobre el golpe que puede significar para ellos el no pago de las deudas que tienen las aseguradoras, Cid se refirió al caso de las deudas que tiene Fonasa con este sector: “Siempre estamos preocupados que no se acumule”, afirmó.
Según cifras de Fonasa, el fondo tiene una deuda de “normalidad”, o sin atrasos a la espera de toda la tramitación administrativa correspondiente para validar el cobro, de $100 mil millones, frente a los $1,2 billones que Fonasa factura con los prestadores privados. No obstante, Cid apuntó que pueden existir problemas en los tiempos de pagos cuando los servicios de salud públicos descentralizados de Fonasa tienen atrasos con el pago de la deuda con las clínicas privadas, y ante esto, el director dijo estar trabajando para solucionar dicho problema.
