La reforma previsional se empieza a mover en el Senado. Si bien los senadores de la Comisión de Trabajo ya habían hecho dos sesiones en las que el gobierno presentó su propuesta, este miércoles se realizó una tercera jornada para dar cuenta del proyecto, donde los parlamentarios empezaron a mostrar sus cartas de cara al calendario de tramitación que esperan tener en dicha instancia.
Esta tercera sesión fue más movida, precisamente porque se realizó el cambio de integrantes de la Comisión de Trabajo, donde asumieron los senadores que estarán en ella durante toda la tramitación del proyecto. Por eso mismo, el inicio de la jornada no estuvo exento de indirectas, dado que este martes la alianza de la derecha y Demócratas le arrebató la presidencia del Senado al oficialismo y puso fin al pacto que había de gobernabilidad, luego de que el senador RN José García Ruminot se impuso frente al candidato del PPD, el senador Pedro Araya.
Pese a todo ello, este miércoles el senador Iván Moreira (UDI) se quedó con la presidencia de la Comisión de Trabajo, tal como estaba acordado con anterioridad. Por eso mismo, una vez que Moreira asumió la presidencia, confesó que durante la mañana se hizo un electrocardiograma, “porque no sabía lo que iba a pasar acá”, comentó, y mostró un papel con el supuesto examen.
También se integraron a la instancia el senador Luciano Cruz-Coke (Evópoli) y la senadora Alejandra Sepúlveda (independiente ex-FREVS). Así, la Comisión quedó integrada con tres senadores de Chile Vamos y dos de oposición, ya que el resto de parlamentarios que la componen son Rodrigo Galilea (RN) y Gastón Saavedra (PS).
Antes de empezar a hablar sobre la reforma previsional, Moreira le entregó un regalo a la ministra del Trabajo, Jeannette Jara. “Este es un regalo, algo dulce. Usted sabe que yo soy una persona muy ligada a los árabes, y esto es de Emiratos Árabes”, le explicó al momento de entregarle el presente. También anunció que reemplazaría la clásica campana que usan los presidentes de las comisiones, por un cuenco tibetano. “Es un sonido para relajarse, para que empecemos nuestras sesiones tratando de relajarse”, puntualizó, y lo hizo sonar un par de veces durante la sesión.
Sin embargo, la sesión se fue complicando. El punto de conflicto principal fue la propuesta que hizo el gobierno con los plazos para votar la idea de legislar la reforma, pues el Ejecutivo intentó poner el pie en el acelerador, frente a lo cual desde la oposición tomaron distancia y también hubo críticas.
La ministra Jara comentó que estaban esperando hablar con los nuevos integrantes de la Comisión de Trabajo para poder ponerle urgencia al proyecto. De hecho, este mismo miércoles se dio cuenta en la Sala del Senado de la urgencia simple ingresada por el Ejecutivo. Jara explicó que esperan que dicha instancia pueda sesionar las primeras dos semanas de abril, dos veces por semana, para así votar la idea de legislar a mediados de abril, y que luego de eso puedan iniciar el debate en particular.
El senador Moreira dijo que hay más de 30 organizaciones que quieren acudir a presentar su postura y que la idea es darles tiempo para que lo puedan hacer. Frente a ello, Jara contestó que “lo que no nos puede pasar, es que esto se diluya o se dilate eternamente”.
El senador Luciano Cruz-Coke retrucó: “Acá las condiciones del debate las pone el presidente de la Comisión, ministra. Me parece que nosotros no podemos legislar a matacaballo, ni pretendemos hacerlo, y si usted quiere votar en abril, el resultado va a ser en contra del proyecto (...) Uno no puede votar la idea de legislar un proyecto que viene trozado, que viene hecho un esperpento de la Cámara de Diputados. Acá hay que presentar algo que tenga una cierta lógica, porque en palabras del propio ministro Marcel, estamos ante la presencia de un queso suizo (...) nosotros hablábamos de un cascarón vacío”.
Cruz-Coke pidió los mismos tiempos que tuvo la Cámara de Diputados para legislar el proyecto, y agregó: “¿Usted está proponiendo que en 20 días estemos votando la idea de legislar? Por ningún motivo, ministra, se lo digo claramente, por ningún motivo”.
Por su parte, el senador Rojo Edwards (exrepublicano), aunque no es miembro de la Comisión, sostuvo que “el plazo que usted plantea, simplemente no es realista”.
En paralelo, la ministra Jara señaló: “Nosotros tenemos una propuesta, sabemos que es facultad de ustedes, y sabemos también la composición de la Comisión”. Y agregó que “lo que no puede ocurrir, es que acá no exista un calendario de tramitación de la reforma”. En ese sentido, detalló que el proyecto estuvo 14 meses en la Cámara de Diputados y en todo ese tiempo no cambió la postura de la oposición.
Moreira recordó que con anterioridad ha dicho que espera que el proyecto sea despachado en julio de la Comisión de Trabajo: “Por ningún motivo vamos a estar un año y medio, sino me retiro antes de acá (...) Lo que yo dije, es que debido a las dificultades, las diferencias que existen entre nosotros (...) yo dije que en esta Comisión a lo menos el proyecto debiera estar aprobado o rechazado en el mes de julio. Eso dije yo, encontré que cuatro meses era razonable”, planteó el senador UDI.
Por su parte, el ministro de Hacienda, Mario Marcel, señaló que “en la Cámara de Diputados el trámite de este proyecto tardó poco más de 14 meses, pero en esos 14 meses el proyecto estuvo detenido durante ocho (meses), donde no se discutió nada”, sin embargo, puntualizó que excluyendo esos meses en que el proyecto estuvo detenido, en realidad tardó menos de seis meses la tramitación en la Comisión de Trabajo de la Cámara Baja.
Pese a todo el debate, finalmente los senadores y el gobierno no lograron llegar a un acuerdo respecto al calendario de tramitación. Lo que sí quedó acordado, es que la ministra Jara se reunirá el próximo 3 de abril con los tres senadores de Chile Vamos que integran la Comisión de Trabajo, donde los parlamentarios esperan poder expresarle su posición sobre el proyecto y lo que les gustaría como oposición para intentar llegar a un acuerdo.
Sobre lo ocurrido este martes en el Senado y respecto de la composición de las comisiones de Trabajo y de Hacienda, la ministra Jara manifestó en un punto de prensa posterior a la sesión que “si bien el Ejecutivo no tiene una mayoría, lo cierto es que para que el proyecto se convierta en ley, dado que requiere un quórum alto, igualmente esta es una conversación que tiene que llevarse con la oposición. Hay ahora sí una responsabilidad de quienes conducen, de que este proceso pueda llegar a buen término, y en particular del senador Moreira”.
Consultado sobre los plazos, el senador Moreira insistió en que es “razonable que la discusión en general dure hasta julio, donde debiéramos estar en condiciones de votar la idea de legislar, teniendo ya un marco de acuerdo”.