La construcción del embalse Punilla en la Región de Ñuble tiene hoy un nuevo capítulo. Ya fue publicado en el Diario Oficial el llamado a licitación, y las ofertas técnicas serán recibidas hasta el 17 de marzo de 2022. Si todo marcha como espera el Ministerio de Obras Públicas, debería estar operativo hacia el año 2030. Es un proyecto de más de US$500 millones, y de una magnitud de 565 millones de metros cúbicos.

“Es uno de los embalses más grandes que tiene Chile. Es un embalse que tiene la ventaja que parte de lo que ya se había hecho. Lo que se había hecho se mantiene. Se mantiene la Resolución de Calificación Ambiental (RCA) del embalse. La RCA que tiene vigente de la línea de transmisión. Se parte con la misma ingeniería del proyecto que existía, porque se mantiene el mismo proyecto anterior. No se pierde nada de lo anterior. Eso va a acortar los plazos. Esperamos tener varias empresas interesadas que puedan participar de esta licitación”, dijo a Pulso el ministro de Obras Públicas, Alfredo Moreno.

El proyecto fue originalmente adjudicado a la empresa Astaldi en marzo de 2016, pero de común acuerdo se puso fin al contrato de concesión. Está emplazado en el sector cordillerano de la Región de Ñuble, a 30 kilómetros de San Fabián y 80 kilómetros de Chillán. Se estima que el embalse podría estar operativo hacia fines de esta década.

“El llamado a licitación es para entregar las propuestas en el mes de marzo. Primero se abren las propuestas técnicas, después los que hayan cumplido con los requisitos técnicos van a la apertura de ofertas económicas. El que se lo adjudique tiene que completar la ingeniería. Ya tiene la aprobación y resolución medioambiental, y tiene que cumplir con las obligaciones de esa resolución. En 2023, y ya una vez completada y aprobada esa ingeniería de detalle, comienza la construcción del embalse”, indicó el secretario de Estado.

El proyecto considera un plazo de concesión por 40 años. Va a permitir asegurar y extender el riego a varias comunas de la Región de Ñuble. Asimismo, considera una reserva prioritaria para el consumo humano. Durante la etapa de construcción, se podrían generar más de 9 mil 800 puestos de trabajo.

“Es una medida de fondo, para poder colaborar a que tengan seguridad de riego las hectáreas que hoy están siendo regadas. De acá a unos años todo indica que va a haber menos seguridad. En segundo lugar, se va a poder ampliar la superficie de riego con nuevos regantes. En tercer lugar, dentro del embalse se ha creado una reserva especial para consumo humano”, enfatizó el ministro Moreno.

Hay además otros proyectos en carpeta para la Región de Ñuble. En 2022 se pondrá en licitación un nuevo embalse en esta región que se llama embalse Zapallar, de 80 millones de metros cúbicos, que está terminando su proceso de aprobación medioambiental. Tendría la RCA en los primeros meses del próximo año, y podría licitarse en el segundo semestre de 2022. Hay también un tercer embalse en proceso que podría licitarse hacia el año 2025. La capacidad de almacenamiento hídrico se va a multiplicar por 30.

Tras un largo conflicto y acusaciones cruzadas, finalmente a fines de julio el MOP y Astaldi firmaron la extinción del contrato de mutuo acuerdo, y el gobierno anunció la relicitación del proyecto.

De hecho, a principios de septiembre de 2019 el Ministerio presentó una demanda de extinción de la concesión del embalse Punilla ante la comisión arbitral. Acusaron incumplimientos graves por parte de la concesionaria.

En ese entonces el MOP sustentó su demanda en que “la Sociedad Concesionaria Aguas de Punilla S.A. no cumplió con su obligación de enterar el capital social de $40 mil millones dentro del plazo que venció el 10 de agosto de 2019 -reduciéndose su capital al monto efectivamente suscrito y pagado-, y no reconstituyó la garantía de construcción dentro de los 15 días siguientes al cobro de la garantía original por parte del MOP”.

Desde la empresa, en tanto, hablaban de falta de certezas. Astaldi habría detectado que el MOP había cometido un error en la definición de la capacidad de almacenamiento del embalse.