La Confederación de la Producción y el Comercio (CPC) no se aventuró a entregar una opinión más categórica tras la presentación de la reforma tributaria porque esperan revisarla más en detalle, pero reiteraron que querían más instancias de conversación antes de dar a conocer la iniciativa en materia de impuestos.

“Yo he conversado con el ministro Marcel en varias oportunidades respecto a la reforma tributaria, donde le he manifestado mis planteamientos, en representación del sector empresarial, donde siento que unos se recogieron en parte y otros que no (...) pero en esto no había proceso de diálogo”, dijo el presidente de la CPC, Juan Sutil, en La Moneda y tras el fin de la actividad de presentación de dicha iniciativa.

Ante esto, Sutil replicó que para los empresarios la instancia de conversaciones tributarios, impulsadas por el Gobierno, no fueron suficientes: “Para mi los diálogos es cuando tu escuchas, rebates, discutes y acuerdas, y ese proceso fue parcial”.

El líder del gremio de los empresarios apuntó que “no me puedo referir al detalle de una reforma sin leerla completa”, más hizo un llamado a tener consideración el contexto económico y gradualidad para impulsar el proyecto.

“Independiente de que hayan cosas buenas, otras que hay que arreglar y otras que hay que mejorar, la incerteza disminuye porque sabes cual es la propuesta que el Gobierno está haciendo a la ciudadanía y al Congreso”, dijo Sutil.

Sobre su disposición a la aprobación de la iniciativa, el presidente de la CPC comentó que “va haber un trabajo colaborativo entre todos los sectores y sociedad para que esto sea lo mejor para Chile”.

Por otro lado, el líder gremial destacó la importancia de utilizar la referencia de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (OCDE) tanto a favor de mayores o menores impuestos.

“Tenemos que revisar en detalle cada una de las propuestas y cada uno de los impuestos que están dentro de estas medidas. Hay uno que están por arriba y otros por debajo (del promedio de la OCDE), y hay que buscar la manera de acomodar eso”, agregó.

Otra de las interrogantes con que quedó Sutil fue la gradualidad con que se implementará la nueva carga tributaria.

No obstante, uno de los puntos que abordó fue la renta al capital tras la consulta sobre si el aumento de tasa puede desincentivar la inversión. Ante esto, Sutil señaló que: “No, fíjese que el impuesto a las empresas se mantiene en 27% y baja en 25% en la medida que se invierta en productividad, desarrollo y capacitación, eso me parece bien”.

Por su parte, el presidente de la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo (CNC), Ricardo Mewes, mostró su rechazo a las medidas anunciadas por el Ejecutivo.

“Nos hubiese gustado una reforma que contribuyera a generar más empleo, más inversión y ahorro y no una reforma que es principalmente recaudatoria”, dijo Mewes por medio de un comunicado.

Desde la CNC precisaron su rechazo ante la iniciativa relacionada a las utilidades debido a que “no han sido retiradas de las empresas, porque ese dinero ya pagó impuesto, y no es una buena señal gravar el ahorro de las sociedades de inversión”.

Otro de los elementos que fue rechazado por el gremio del comercio tuvo relación con la renta del capital.

“Tampoco nos parece que las rentas del capital paguen un 22% como tarifa plana y que no se reconozca como crédito el impuesto pagado anteriormente por la empresa”, agregó Mewes.

Sin embargo, no todo fue negativo para el gremio del comercio y valoró otros aspectos de las propuesta del Gobierno.

“Quedamos conformes con la reducción del impuesto corporativo, porque eso entrega una señal al sector para invertir y nos alegra que a la pequeña y mediana empresa no le variará el mecanismo tributario, en especial debido al complejo momento económico que estamos viviendo y valoramos la preocupación por la informalidad y que haya sido un elemento a tener presente a través del régimen especial para empresas que se formalizan o que comienzan a realizar actividades empresariales”, señaló Mewes.

La Cámara Chilena de la Construcción (CChC) asimismo dijo que no eran tiempos para impulsar la reforma tributaria y se debía esperar el momento más oportuno.

“La prioridad debería estar puesta en promover la actividad y la inversión, el crecimiento económico y la creación de empleo”, dijo su presidente Antonio Errázuriz por medio de un comunicado.

El dirigente también mostró su rechazó al aumento de los impuestos al arriendo de vivienda DFL2, “creemos que impactará en el precio de los arriendos y, en consecuencia, en menores posibilidades de las personas para acceder a una vivienda por esta vía”.

Errazuriz defendió su punto recordando la eliminación del Crédito Especial de Empresas Constructoras, CEEC, “que quitó un subsidio indirecto a las familias y provocará un aumento del costo de construcción de las viviendas de hasta 12%, presionando al alza su precio”.

Ante esto, la CChC llamó a una “mirada global en el tema del déficit de viviendas. Porque se dice que hay crisis habitacional –lo que es estrictamente cierto–, pero al mismo tiempo se proponen medidas que podrían profundizarla”.

No obstante, el presidente del gremio de la construcción valoró que se “contemple ayuda a las pymes, incentive la productividad y mejore los ingresos regionales”, pero Errázuriz también agregó que se debe evaluar la propuesta en su conjunto y aportar para corregir lo que sería negativo para el país, según al juicio de la CChC.

Por su parte, desde la Sociedad Nacional de Agricultura (SNA) esperan que el aumento de los impuestos que vendrá con la reforma efectivamente cumpla el objetivo de recaudación del 4,1% del PIB. Esto además de que “vaya de la mano con la responsabilidad fiscal y un buen uso de recursos que empujen el desarrollo del país. Para esto, serán relevantes las medidas que se introducirán contra la evasión y elusión”, señaló el presidente de la institución, Cristián Allendes, en una declaración pública.

Asimismo, en su declaración Allendes aseguró que “nos gustaría que la tramitación del proyecto en el Congreso considere mayores incentivos a la inversión y productividad”, a lo que agregó que una reforma como esta, en un escenario económico desafiante y con el temor de una eventual recesión, “debe ser muy bien implementada ya que puede generar más perjuicios que beneficios”.

“A su vez, estaremos atentos a las facilidades tributarias que se plantean al régimen de pymes, queremos ver si eso se llevará a la práctica, ya que más del 90% los agricultores pertenecer a este grupo”, concluyó el presidente de la SNA.