La naviera alemana Hapag-Lloyd, que es la principal inversión de Compañía Sudamericana de Vapores (CSAV) del grupo Luksic, cerró un nuevo ejercicio con positivos resultados al registrar ganancias por US$17.959 millones en 2022 frente a los US$10.750 millones de 2021, pero advirtió que prevé una caída significativa para este año.
“En general, miramos atrás un 2022 muy exitoso con resultados excepcionalmente fuertes. Esto nos ha permitido fortalecer una vez más nuestra resiliencia financiera y estructura de activos. Además, mejoramos la calidad del servicio a nuestros clientes y hemos invertido en terminales e infraestructura, así como en la eficiencia de nuestra flota. Sin embargo, los costos, tales como combustible, barcos fletados y manejo de contenedores, han aumentado significativamente”, dijo Rolf Habben Jansen, CEO de Hapag-Lloyd AG.
Los ingresos aumentaron a US$36.401 millones frente a $26.356 millones del 2021, impulsados principalmente por un alza en la tarifa de flete promedio, a 2.863 US$/TEU versus 2.003 $US/TEU) del año anterior.
Sin embargo, hacia fines de año, la tarifa de fletes disminuyó significativamente debido a la reducción de la congestión en los puertos y a menor demanda.
Los volúmenes de transporte se mantuvieron a la par con el nivel del año anterior, en 11,8 millones de TEU (2021: 11,9 millones de TEU), debido a las exigidas cadenas de suministro, dijo la compañía.
Al mismo tiempo, la alta inflación se hizo notar en los costos unitarios. Los gastos de transporte aumentaron un 18,5% a US$14.500 millones.
Dividendo y perspectivas
La compañía señaló que dada la excepcionalmente sólida ganancia, el patrimonio ha crecido a 28.000 millones de euros y el índice de patrimonio ha aumentado a más del 70%. Por ello, reiteró que la Junta Ejecutiva y el Consejo de Supervisión de Hapag-Lloyd AG han decidido proponer a la Asamblea General Anual que se pague un dividendo de 63 euros por acción para el año financiero 2022, lo que corresponde a un pago total de 11.100 millones de euros.
En cuanto a las perspectivas la naviera precisó que espera que las ganancias se normalicen gradualmente en el año financiero 2023. Sin embargo, aclaró que este pronóstico sigue sujeto a una incertidumbre considerable dada la guerra en curso en Ucrania y otros conflictos geopolíticos, así como los impactos de la alta inflación.
“En el año financiero actual hemos tenido un buen comienzo, pero la economía se ha enfriado y sigue siendo inevitable una disminución significativa en las ganancias. Por lo tanto, continuaremos actuando con flexibilidad y vigilando de cerca nuestros costos”, indicó Habben Jansen.
Así la compañía prevé que el Ebitda (ganancias antes de intereses, impuestos, amortizaciones y depreciaciones) se ubicará entre US$4.300 millones y US$6.500 millones frente a los US$20.500 millones de 2022.
