La crisis económica global sigue dejando huella en el intercambio comercial de Chile, que durante la primera quincena de mayo registró un derrumbe de 28% en sus importaciones hasta US$2.070 millones, en el peor desempeño interanual que se registra para ese periodo desde 2009.

No hubo ítem que se salvara de los descensos, aunque los bienes de consumo fueron los más golpeados, al anotar US$550 millones que corresponden a una baja de 33% en relación a los primeros 15 días de mayo de 2019.

En esta área las caídas más estrepitosas fueron de 54% en bebidas y alcoholes, 54% en celulares y 47% en automóviles. Aunque en el caso de bienes intermedios el descenso fue de 28%, también se observan caídas relevantes como las de 96% en petróleo y 84% en diésel. En tanto, el apartado de bienes de capital, que anticipa inversiones, bajó 13%.

Las exportaciones tampoco lograron escapar a la tendencia de un deprimido comercio global, que de acuerdo a la OMC cederá entre 13% y 30% en 2020, dependiendo de la extensión de las cuarentenas.

Los envíos de la primera quincena llegaron a US$2.708 millones, lo que representa un descenso de 10,5%, el más amplio desde 2015. Aunque la caída de las exportaciones mineras se limitó a 3,7%, con un retroceso de 3,6% en el cobre, los desplomes de 26% en los envíos de celulosa y papel y de 25% de productos silvoagropecuarios, terminaron por definir una caída más profunda.