El avance inflacionario no da tregua en Argentina. El IPC de febrero subió un 6,6%, y superó las estimaciones del mercado que esperaban una cifra cercana al 6%. Además, alcanzó en la medición interanual su cifra más alta en más de 30 años.
El dato interanual superó el 102,5% y el IPC acumula una subida de 13,1% en los primeros dos meses del año. Es el dato más elevado desde octubre de 1991, ya que desde ese entonces no se alcanzaba la barrera de los tres dígitos.
Según datos entregados por el Instituto Nacional de Estadísticas y Censos, el alza inflacionaria del segundo mes del año, se explica en parte por el avance de los precios de los alimentos y tarifas de servicios públicos.
“La división de mayor aumento en el mes fue Alimentos y bebidas no alcohólicas (9,8%), principalmente por la incidencia que tuvo el alza de Carnes y derivados y de Leche, productos lácteos y huevos”, señaló el Indec en su informe correspondiente al mes de febrero.
Y agregó que “las siguientes divisiones con mayores aumentos fueron Comunicación (7,8%), sobre la que incidió el alza de los servicios de telefonía e internet y Restaurantes y hoteles (7,5%), por las subas en Restaurantes y comidas fuera del hogar. También se destacó en el período el aumento de: las cuotas de las prepagas, que impactó sobre Salud (5,3%); cigarrillos, en Bebidas alcohólicas y tabaco (5,2%); los combustibles, dentro de Transporte (4,9%); y los servicios de electricidad y agua en algunas regiones, en Vivienda, agua, electricidad y otros combustibles (4,8%)”
Y continúan los nubarrones en el horizonte, ya que los analistas prevén que la inflación en el mes en curso podría superar el 7%.
Medidas del gobierno
El alza inflacionaria continúa siendo un dolor de cabeza para el gobierno de Alberto Fernández a solo siete meses de las elecciones presidenciales. Las autoridades han anunciado una serie de medidas para intentar contener la subida de precios, sin embargo, por el momento no han dado frutos, ya que los precios han seguido escalando en los últimos meses.
De hecho, a mediados de marzo del año pasado, el gobierno trasandino le declaró la guerra a la inflación, pero los precios han continuado escalando, lo que supone un duro golpe al bolsillo de los consumidores. En el momento del anuncio de Alberto Fernández, la inflación interanual era superior al 50%, mientras que en un año se ha duplicado la cifra.
“Espero que esta semana podamos empezar a poner orden al tema de la deuda tremenda de la deuda que heredamos. Y el viernes empieza la guerra contra la inflación en la Argentina; vamos a terminar con los especuladores”, señaló el presidente Fernández el pasado 15 de marzo.
Pocos días después el Mandatario dijo que “yo no quiero quedar bien con dios y con el diablo. Necesito que la gente pueda vivir en paz y que los precios bajen. Hay diablos que hacen subir los precios y lo que hay que hacer es hacer entrar en razón a los diablos. Si no, aplicaremos las herramientas que tenemos. La ley de abastecimiento es una que tenemos”.
Hace solo un mes y tras conocer el dato inflacionario de enero, donde el IPC subió un 6% el ministro de Economía, Sergio Massa, dijo que seguirían adelante en su lucha contra la subida de precios en Argentina.
“Ningún mal resultado en un partido me va a sacar de la pelea en el campeonato por bajar la inflación”, sostuvo Massa en entrevista con CNN.
Y agregó que “lo más difícil es administrar expectativas, sobre todo porque me tocó asumir una crisis política y económica: 7,4% de inflación, reservas negativas, con un enorme deterioro en la balanza comercial; y además con precios relativos absolutamente desacomodados”.
Asimismo, indicó que el objetivo de llevar la inflación a un 60% este año es posible de alcanzar.