Un mejor escenario para Chile que en el pasado entregó la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos (Ocde). El organismo internacional entregó nuevas perspectivas que revisaron al alza la situación del Producto Interno Bruto del país, pero de igual forma sigue en el terreno de la contracción.

En noviembre del año pasado, la Ocde dijo que el PIB nacional durante 2023 bajaría 0,5% y en su nuevo informe ahora señaló que Chile caería solamente 0,1%.

La evaluación sobre Chile se da en un contexto en que estima que, a nivel mundial, la economía “está dando un giro, pero aún tiene un largo camino por delante hasta alcanzar un crecimiento sólido y sostenible”.

El descenso de los precios de la energía y de la inflación general, la disminución de los cuellos de botella en las cadenas de suministros y la reapertura de la economía china, sumados a la solidez del empleo y unas finanzas de los hogares resilientes, contribuyen a las previsiones de una recuperación de acuerdo a la mirada de la Ocde.

Sin embargo, la Ocde matizó que las tasas de crecimiento proyectadas para el mundo en 2023 de 2,7% es un nivel alejado para las cifras vistas a nivel global previo a la llegada de la pandemia por Covid-19.

Solo reformas estructurales ambiciosas pueden aumentar de forma sostenible el crecimiento económico a largo plazo y la calidad de vida de las personas en todo el mundo”, dijo la Ocde.

La mirada a Chile

Desde la Ocde explican las proyecciones para Chile apuntando al “endurecimiento de las condiciones financieras y la retirada de las ayudas relacionadas con la pandemia reducirán el consumo de los hogares durante el primer semestre de este año”.

En esa línea, el organismo agregó que el nivel de las tasas de interés y la incertidumbre también afectarán negativamente a la inversión durante 2023. Otras de las conclusiones sobre la economía de Chile es que ven una política monetaria restrictiva y estima que los descensos moderados en la tasa de interés llegarán recién en la segunda mitad del 2024.

Por otro lado, la Ocde estima que el gobierno del Presidente Gabriel Boric no podrá lograr de nuevo un superávit fiscal. “El déficit del Gobierno central se situará en el 2,0% del PIB en 2023 y en el 2,1% en 2024, sin que suponga una amenaza para la sostenibilidad de la deuda”, matizó.

Si bien la proyección de la Ocde sobre Chile es mejor a la pasada, el organismo reiteró su alerta en que los datos económicos como el Índice Mensual de Actividad Económica (Imacec) y las ventas minoristas y de automóviles son débiles. Un escenario que, a juicio de la Ocde, no ha ayudado del todo a combatir la inflación: “la inflación ha sido persistente, con los indicadores para inflación general y subyacente disminuyendo levemente y manteniéndose alrededor del 10%”.

No obstante en relación al costo de la vida, el organismo apuntó que “a medida que los efectos del endurecimiento de la política monetaria se trasladen a la actividad, la inflación seguirá disminuyendo a lo largo de 2023 y volverá a su objetivo a finales de 2024″.

“Las expectativas de inflación a un año están cayendo, al tiempo que las expectativas a dos años se mantienen ancladas a la banda de tolerancia del Banco Central. Los salarios reales empezaron a recuperarse en los primeros meses del 2023″, agregó la Ocde, por medio de su economista jefe, Clare Lombardelli, quien también pidió a los países a retirar las ayudas para destinar los “recursos limitados (...) solo a quienes realmente los necesitan y a inversiones prioritarias que aumenten la productividad”.

Las proyecciones de la Ocde también se conocen en una semana en el Banco Mundial (BM) entregó su mirada sobre Chile. El BM también mejoró su estimación para el PIB del país durante 2023 de -0,7% a -0,4%.

Entre las otras visiones sobre la economía del futuro de la economía de Chile están las del Fondo Monetario Internacional (-1%), el Banco Central (entre -0,5% y 0,5%) y la del gobierno del Presidente Gabriel Boric (0,3%).

Por otro lado, el informe también entregó miradas sobre otros países de la región. De esta forma, Chile para este año tiene un mejor panorama que Argentina (-1,6%), pero peor que Costa Rica (2,8%), México (2,6%), Brasil (1,7%), Perú (1,7%) y Colombia (1,5%).

Las economías de mercado emergentes se enfrentan a retos derivados de unas condiciones financieras globales restrictivas: mayores costes del servicio de la deuda, salidas de capital y menor disponibilidad de crédito por parte de los prestamistas extranjeros”, añadió la Ocde, que también incluyó como un problema las tensiones geopolíticas y los posibles efectos en las cadenas de suministros.

Avanzar en una reforma tributaria

La Ocde también estimó que Chile debe avanzar en una reforma tributaria, un llamado que se da en el contexto de que el Ejecutivo busca lograr acuerdos con la oposición para tramitar la iniciativa en materia de impuestos.

La mejora de los programas sociales y de las infraestructuras exigiría aumentar los ingresos —desde sus bajos niveles, en comparación con la OCDE— a través de un sistema tributario más progresivo”, dijo la Ocde.

En ese sentido, el documento plantea ideas como “ampliar el acceso a la atención de primera infancia e incrementar la financiación de la educación preescolar puede mejorar los resultados educativos de niños de familias con bajos ingresos e impulsar la participación de la mujer en el mercado laboral”.

Sobre el mejor rendimiento del desempeño de Chile, la Ocde también estimó que “la productividad puede impulsarse reforzando la competencia mediante la reducción de las barreras al emprendimiento y una financiación adecuada de la autoridad de la competencia, y aumentando la inversión en iniciativas eficientes de investigación y desarrollo más eficaces”.

En esa misma línea de avanzar en reformas, la Ocde también planteó sacar adelantes estas incitabas para no alejar a las inversionistas: “Si no se aprobara una nueva Constitución y no se aportara mayor claridad sobre el futuro de la reforma tributaria se podría incrementar la incertidumbre sobre las políticas, menoscabando la confianza de las empresas y los consumidores, y haciendo que el consumo y la inversión crezcan débilmente”.