Una baja de 15,7% registraron en 2023 las licencias médicas electrónicas por enfermedad o accidente común emitidas con pronunciamiento, en comparación a 2022. Eso es lo que revela un informe de la Superintendencia de Seguridad Social (Suseso) con cifras al cierre del año pasado, donde muestra que si en 2022 se emitieron 9.150.938 con pronunciamiento, en 2023 fueron 7.715.412.
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La baja de licencias médicas se registró tanto en el asegurador público como en los privados, pero la caída registrada en isapres fue más del doble que la registrada en Fonasa. Esto, porque en isapres se emitieron 1.442.731 licencias con pronunciamiento en 2023, una baja de 26,5% versus 2022. En cambio, en Fonasa fueron 6.272.681, una caída de 12,7%.
Al ver el estado de resolución del total de licencias emitidas con pronunciamiento el año pasado, se obtiene que un 7,4% fueron rechazadas, esto es mayor que la tasa de rechazo de 6,7% que hubo en 2022. Y tanto en isapres como en Fonasa aumentaron los rechazos. En el asegurador público la tasa de rechazo subió desde el 5,7% de 2022, a 6,4% en 2023. En isapres aumentó desde 10,5%, a 12,2%.
“Sin embargo, es importante señalar que esta diferencia va a disminuir con el pasar del tiempo, ya que, de acuerdo a lo establecido en la legislación, las licencias rechazadas pueden ser apeladas y, por tanto, revertidas en el futuro. Este hecho dificulta hacer comparaciones precisas entre años”, dice el estudio de la Suseso.
Principales diagnósticos
Casi todos los diagnósticos presentan bajas en licencias emitidas con pronunciamiento, con excepción de tres. Las licencias por diagnósticos relacionados con las enfermedades respiratorias fueron las que registraron la mayor alza, con un incremento de 30,3% interanual, sumando 1.136.658 licencias en 2023, lo que representa un 14,7% del total. Las enfermedades infecciosas y parasitarias subieron en un 23,6%, hasta 372.003, es decir, un 4,8% del total. En tanto, las digestivas se empinaron en un 6,9% a 370.998, concentrando un 4,8% del total.
Entre las mayores caídas porcentuales, las licencias emitidas por Covid-19 se llevan el podio, ya que disminuyeron 88,5% a diciembre en comparación a igual lapso de 2022, totalizando 179.462 licencias. El segundo lugar se lo llevan las licencias por trastornos mentales, con un retroceso de 9,8%, sumando 2.490.893. Luego se ubican diagnósticos del musculoesqueléticas (-5,1%), sistema nervioso (-3,8%), las relativas a traumatismos (-1,2%) y las agrupadas en otros (-5,2%).
Al ver la distribución de las licencias con pronunciamiento emitidas en 2023, se observa que es distinta a la que hubo en 2022, “donde las licencias por Covid-19 concentraron el 17% del total de licencias del año 2022, mientras que en el año 2023 concentran sólo el 2,3%. A su vez, se observa que producto de esta misma situación, las licencias médicas por trastornos mentales concentran una mayor proporción de licencias en el año 2023 que en el año 2022, 32,3% y 30,2% respectivamente”, detalla el informe de la Suseso.
El documento enseña las tasas de rechazo según principales grupos de diagnóstico. Ahí la mayor tasa de rechazo se la lleva por lejos el diagnóstico de trastornos mentales, que en Fonasa representó un 13% del total de ese tipo de licencias médicas emitidas con pronunciamiento en 2023. Y en isapres fue más del doble: rechazaron el 29,2% de este tipo de licencias. Le siguieron las enfermedades musculoesqueléticas y del sistema nervioso. En el caso del primer diagnóstico, Fonasa rechazó el 5,4% y las isapres un 11,4%. En el segundo diagnóstico, Fonasa rechazó el 6,3% y las isapres el 10,8%.
Existe “una diferencia importante en las tasas de rechazo entre Fonasa e isapre. Así, las tasas de rechazo en isapre son superiores a las de Fonasa en todos los grupos de diagnóstico durante todo el período analizado. Este resultado es esperable por cuanto, de acuerdo a las estadísticas oficiales de LM & SIL, las isapres siempre han tenido tasas de rechazo superiores a las de Fonasa. Asimismo, un gran porcentaje de las licencias médicas rechazadas de las isapres son revertidas en las instancias de apelación y reclamación establecidas en la normativa”.
El informe también muestra el número de días promedio autorizados. Ahí es posible ver que en todos los grupos de diagnóstico disminuyó ese promedio en 2023, con excepción de “otros”. Y las licencias por trastornos mentales y traumatismos fueron las de mayor duración en 2023, con un promedio de 18,9 días y 17,9 días, respectivamente.