Aún resta un pequeño trámite formal, porque el más complejo ya fue sorteado. La venta de Chilevisión por parte del gigante Warner Media a su competidor estadounidense Viacom CBS consiguió esta semana la autorización de libre competencia de parte de la Fiscalía Nacional Económica, pero compradores y vendedores esperan ahora la venia -por las exigencia de la Ley de Prensa- del mismo organismo. Luego deberán comunicar el cambio de propiedad al Consejo Nacional de Televisión (CNTV). Ambas vallas están a baja altura y son simples de sortear; la más compleja era la de la FNE. Pero no lo fue tanto.
La transferencia fue anunciada en abril y desde el 19 de mayo el proceso estuvo en manos del organismo que dirige el abogado Ricardo Riesco, que esta semana determinó que la operación no solo no era anticompetitiva, sino que favorecía la desconcentración del mercado. Ello, por el desbalance de tamaños entre el vendedor y el comprador.
El grupo Warner Media, controlador también de CNN Chile y CDF (ahora TNT Sport), se desprende de una de sus tres señales (Chilevisión), disminuyendo así en algo su enorme poder de mercado, un tamaño que la FNE midió: es 40 veces más grande en venta de publicidad televisiva que Viacom CBS y 12 veces en avisaje digital. Esa desconcentración, razonó la FNE, podría mejorar la posición negociadora de avisadores y agencias de medios y, por otro lado, de canales de televisión, si desean negociar la provisión de contenido multimedia.
El informe que aprobó la operación será dado a conocer en los próximos días y su tramitación, que tardó menos de dos meses, estuvo a cargo del estudio Cariola Díez Pérez-Cotapos, en el caso de Warner Media, y del bufete PPU, por Viacom CBS.
En el grupo vendedor sostienen que una vez que se produzca las autorización final, la transferencia se materializará con la firma de los contratos. La FNE ya está analizando ahora la transacción bajo el prisma de la ley de prensa, y su pronunciamiento no debería ser muy distinto del que tuvo en el ángulo de la libre competencia. Distinta es la situación en el CNTV, que debe autorizar previamente solo cuando hay un cambio en la titularidad de las concesiones. Y en el caso de Chilevisión no lo hay: Chilevisión sigue siendo la dueña de la concesión, pero con otro dueño.
Por ello, desde el CNTV aclaran que el procedimiento no requiere de su autorización. La presidenta del organismo, Carolina Cuevas, recibió el 5 de abril una carta del presidente ejecutivo de Chilevisión, Jorge Carey, informando la suscripción de un acuerdo de compraventa de Chilevisión, lo que estaba sujeto a varias condiciones, entre ellas el informe favorable de la FNE. “El Consejo Nacional de Televisión no ha recibido otra comunicación de parte de Chilevisión”, respondió el jueves el CNTV a Pulso.
El organismo recordó que la concesionaria debe informar al consejo, dentro de los cinco días siguientes, todo cambio en la presidencia, directorio, gerencia, administración y representación legal y, en el caso de una sociedad anónima, la transferencia de sus acciones. Ello, para velar que los titulares de una concesión televisiva debe ser una persona jurídica constituida en Chile y con domicilio en el país.
Viacom ya dio un paso para ello: el 10 de junio constituyó las dos sociedades en Chile que comprarán las acciones de la estación: ViacomCBS Chilevisión Holding I y II, cuyo accionista es VIMN Finance Holding, una firma constituida bajo las leyes de Inglaterra y Gales.
Así, el traspaso sería cosa de días. Una vez que reciban la última autorización, se firma el contrato de compraventa y se paga el precio. El grupo Warner Media compró en octubre de 2010 Chilevisión en US$ 155 millones a Sebastián Piñera. Y aunque el precio en el que venderá no ha sido divulgado por las partes, el monto se acerca a la mitad de lo que Warner pagó hace 10 años. Con ello, Warner no tendría ganancias de capital y no pagaría impuestos por la operación. Al contrario, con la transacción podría emplear esas pérdidas para rebajar su base imponible. El propietario del 99,9% de las acciones de Chilevisión es Inversiones Turner I Limitada (ahora Warnermedia Chile Inversiones Ltda.), una sociedad que reportaba un capital de $ 137.202 millones en octubre de 2020 y que es la dueña, además, de los 55 mil metros cuadrados de la ex Machasa. Esos terrenos los arrienda a sus tres estaciones de televisión.
Además de Chilevisión, Warner Media es dueña de CNN Chile Canal de Televisión Limitada, empresa que tiene un capital de $ 160.169 millones. CNN Chile es accionista de Inversiones Turner I Limitada.
La dueña de CNN Chile es Turner Internacional Latin America en un 88%. Y de esa sociedad cuelga su tercer activo en Chile: el Canal del Fútbol SpA (antes Turner Sport Chile Holding), firma que en 2019 tenía un capital social de $ 73.655 millones.
La división
Cuando se cierre la compra, el nuevo dueño podrá nominar a su directorio -deben ser todos chilenos, según la ley- y un nuevo director ejecutivo.El principal candidato es Juan Ignacio Vicente, quien dejó en mayo su cargo como director de contenidos y negocios internacionales de Megavisión y fue contratado por Viacom CBS.
Chilevisión se mantendrá en las instalaciones de Machasa, donde utiliza 7.000 metros cuadrados, CNN ocupa 1.253 metros cuadrados y el CDF subarrienda, desde abril de 2020, 1.350 metros cuadrados, según los balances de Chilevisión. El arrendatario de todos es Turner International I Limitada.
Chilevisión seguirá utilizando los espacios de Avenida Pedro Montt 2354 mediante un arriendo de largo plazo, dicen fuentes ligadas a la operación, pero tiene una opción de compra por el terreno. Los balances de Chilevisión describen que tiene un contrato con una duración hasta 2019, con renovación automática.
La misma división ocurrirá en las dotaciones de personal. Chilevisión tiene el mayor número de empleados de las tres empresas que hasta ahora controla Warner Media, lo que seguirá siendo así. A marzo, según los estados financieros de la estación, Chilevisión tenía 720 trabajadores, 41 más que los que reportó en diciembre de 2020, en un ajuste de dotación que derivaría de la transacción. Y la división de los tres canales de Warner Media.
No contratar a ciertos trabajadores
El reparto de las tres piezas de Warner Media no incluirá a los rostros principales, un activo estratégico que pesa sobre el negocio televisivo. Lo reveló la comunicación de la FNE de esta semana. “La FNE también analizó los acuerdos accesorios a la operación, como algunas cláusulas de no contratación de ciertos trabajadores, concluyendo que éstos no son anticompetitivos, debido a que están directamente vinculados a la operación, son necesarios para su materialización y están acotados en el tiempo”, dice el texto.
Con ello, por ejemplo, Warner Media evita que ViacomCBS, ahora dueño de Chilevisión, levante personal clave de CNN. O viceversa. Ninguna de las partes quiso precisar cuántas personas estaban incorporadas en estos acuerdos, pero una de ellas precisó que no era un número muy alto y que esa restricción tenía una duración cercana a los seis meses. “Es un pacto de caballeros”, dice una persona que conoce las condiciones accesorias del negocio. Cláusulas como esta, dicen algunos abogados, podrían ser ajustadas a la libre competencia, pero no necesariamente a la legislación laboral y la Constitución, que garantizan la libertad de trabajo.