Antofagasta plc,, brazo minero del grupo Luksic y controladora de Antofagasta Minerals, anunció este viernes el ingreso en la propiedad de Compañía de Minas Buenaventura, la mayor empresa peruana de metales preciosos y básicos cotizada en bolsa, y uno de los principales dueños de derechos mineros en Perú.
Según detalló la declaración realizada por la compañía, la adquisición se realizó a través de transacciones en el mercado secundario, con lo que alcanzó la propiedad efectiva de aproximadamente el 19% de las acciones en circulación.
Los títulos de la minera se transan tanto en la Bolsa de Lima como en la New York Stock Exchange, donde actualmente la capitalización bursátil ronda los US$2.817 millones. Dichos papeles cerraron con un alza del 25,13% este viernes, a US$12,50 por cada acción, frente a los US$9,99 del cierre anterior. Con ello, la adquisición rondaría un valor cercano a los US$539 millones.
La adquisición, que marca el ingreso del grupo Luksic al sector minero peruano, será financiada con fondo propios de Antofagasta plc, lo que “está en línea con su estrategia de priorizar la exploración y la inversión en las Américas”, dijo la firma a través de un comunicado de prensa.
El presidente del directorio de Antofagasta plc, Jean-Paul Luksic, destacó que “nuestra inversión demuestra el importante potencial que vemos en la cartera de activos de Buenaventura”.
Buenaventura tiene 70 años de historia en la industria peruana, y opera en tres de los distritos mineros más importantes del país. Su producción es diversificada, ya que explota oro, plata, cobre, zinc y plomo. Entre sus activos más emblemáticos se encuentran los proyectos de cobre Cerro Verde -donde tiene el 19,58% de la propiedad, Sumitomo Corporation el 21%, y Freeport-McMorRan el 53,56%-y El Brocal; de oro, San Gabriel; y de plata, Yumpag. A ello suma otros 15 proyectos que están en etapas de exploración.
“Estamos entusiasmados con la posibilidad de trabajar con esta compañía para desarrollar ese potencial, de una manera que maximice el valor para Buenaventura y sus diferentes stakeholders, con una operación responsable y sostenible, comprometida con las comunidades, empleados, clientes, proveedores, reguladores y otras partes interesadas”, agregó Jean-Paul Luksic sobre la transacción.
Buenaventura reportó ingresos por US$570 millones entre enero y septiembre de 2023, aunque la última línea da cuenta de pérdidas por US$43 millones en el período. En 2022, de acuerdo a su memoria, obtuvo una utilidad neta de US$603 millones, luego de dos años consecutivos de números rojos. De ellos, US$479 millones se explicaron por la venta de su participación en Minera Yanacocha a Newmont Corporation, uno de las mayores mineras enfocadas en la explotación de oro.
Por estos días, el brazo minero del grupo Luksic se apresta a entregar otra relevante noticia para su negocio en Chile: la aprobación de la inversión por cerca de US$3.700 millones para desarrollar una segunda concentradora en el distrito Centinela, la que será sometida a evaluación del directorio antes de que finalice 2023.
Presencia en el directorio
La idea del grupo chileno es contar con participación en el directorio de la firma peruana. “Una vez que Buenaventura conoció el interés de Antofagasta plc, las partes iniciaron conversaciones para desarrollar un marco de colaboración en beneficio de la compañía y sus stakeholders, incluyendo temas estratégicos, operativos y financieros. En estas conversaciones, se ha propuesto que Antofagasta plc esté representada en el Directorio de Buenaventura”, dijo la empresa en su comunicado.
La mesa de Buenaventura, compuesta por siete integrantes, es liderada por Roque Benavides, uno de los más influyentes empresarios del sector minero en Perú, y heredero del fundador, Alberto Benavides de la Quintana.
El ingeniero civil, que también funge como presidente ejecutivo desde marzo de 2011, comenzó su trayectoria en la compañía en 1977. Allí está acompañado por su hermano Raúl, quien trabaja desde 1980 para la firma y es director en 11 empresas relacionadas al holding minero. El resto de los directores son todos independientes.