La ministra de Salud, Begoña Yarza, realizó un llamado a la calma ante la difícil situación financiera que afecta a las isapres, las que presentan pérdidas por segundo año consecutivo, y que han llevado al gremio que las agrupa ha advertir sobre la posibilidad de que alguna de las aseguradoras pueda entrar en insolvencia y quebrar.
Yarza recordó que la semana pasada el Superintendente de Salud, Víctor Torres, se reunió con representantes de cada una de las isapres y que mañana se iniciará la mesa de trabajo entre autoridades de Salud y las empresas para buscar una salida a la situación.
“Yo llamo a la calma, yo creo que la mesa de trabajo generando una conversación que dé más certeza administrativa, en este tipo de empresas el riesgo futuro es un elemento que pone una cierta angustia, yo creo que la conversación que vamos a establecer a partir de mañana en esta mesa de trabajo va a generar tranquilidad”, afirmó en entrevista con T13 Radio.
La ministra señaló que como gobierno tienen propuestas que hacer, pero no precisó en qué consisten.
Sobre la petición de las aseguradoras de tener certeza jurídica, ante la masiva judicialización de casos de afiliados que han interpuesto recursos antre los tribunales reclamando por el alza en los planes de salud, Yarza indicó que se debe tomar en cuenta que no todas las isapres están en la misma condición ya que existen particularidades entre las preocupaciones de cada una.
Cuidar a los afiliados
Frente a la posibilidad de que alguna quiebre la ministra enfatizó que “yo creo que este camino que estamos tomando va a dar tranquilidad”.
Agregó que “yo creo que lo que el gobierno, y en particular para nosotros que estamos liderando Salud, a los que queremos cuidar es sobre todo a las personas, las personas que están en isapres también son foco de nuestro cuidado, no quisiérmos nosotros que se desplomaran, vamos a cuidar a las personas que están en Fonasa, pero también a las personas que están en isapres”.
El mayor gasto en prestaciones y el congelamiento de los planes de salud le siguen pasando la cuenta a las isapres. Y es que en el segundo trimestre del año continuaron profundizando las pérdidas registradas en la primera parte, y de hecho sólo una de las seis compañías abiertas anotó utilidades.
Así, según informaron la semana pasada, entre enero y junio las pérdidas del sector totalizaron $73.607 millones, es decir $52 mil millones más que la merma que registraron en el primer trimestre del ejercicio cuando tuvieron un saldo negativo de $21.000 millones.
Colmena reportó pérdidas por $5.127 millones, Consalud de $26.531 millones, Cruz Blanca de $26.822 millones, Nueva Masvida $233 millones, y Banmédica con $16.592 millones. Sólo Vida Tres registró ganancias por $1.700 millones.
Desde la Asociación de Isapres comentaron que los resultados se deben, principalmente, al congelamiento del precio de los planes de salud que se aplicó durante 2020 y 2021. A eso, se suma un mayor gasto en prestaciones (cirugías, consultas médicas, exámenes y procedimientos) y licencias médicas.