El ministro Secretario General de la Presidencia de Chile, Giorgio Jackson, se mostró optimista respecto a la tramitación del proyecto de reducción de la jornada laboral de 45 a 40 horas semanales en el Congreso y estimó que durante el próximo año se podrá comenzar a implementar la medida.
“Yo tengo la esperanza y bastante confianza de que este proyecto se pueda tramitar muy rápido en el Congreso. Le hemos puesto suma urgencia, lo que significa que el Senado tiene 15 días para despacharlo y discutir las indicaciones (...) Esperamos que en uno o dos meses esté tramitado y, por lo tanto, sea ley”, dijo el ministro Jackson, en entrevista con el matinal de TVN, quien agregó que “el próximo año ya estaríamos con una hora menos de trabajo”.
El secretario de Estado respaldó su punto con el proceso de diálogos que impulsó el gobierno antes de presentar las indicaciones que le dieron un reimpulso a la iniciativa.
El secretario de Estado matizó que el primer año de implementación se comenzará con una baja de una hora semanal en la jornada laboral, a los dos años se llegará a las 42 horas y en cinco años se reducirán las horas trabajadas a 40. Jackson destacó que la gradualidad está enfocada a las empresas de menor tamaño e invitó a las más grandes a implementar la medida lo más pronto posible.
“El proyecto es sumamente flexible para que se adapte a cada una de las situaciones. Y esperamos que ahora en el Congreso, cuando tengamos la discusión, aparezcan todos los casos en que es necesario modificar la flexibilidad de la jornada para que este beneficio llegue a todos”, agregó el ministro.
En esa línea, Jackson matizó que la flexibilidad laboral es un beneficio cuando se puede pactar con el empleador sin presiones: “La ley trata de regular esa asimetría”, detalló.
Sobre la situación de las personas que trabajan con el artículo 22 del Código del Trabajo, que permite extender el horario laboral más allá de las 45 horas semanales, Jackson explicó que con la nueva ley “se va traducir en el pago de horas extras por sobre las 40 horas semanales o la compensación con días libres”.
El ministro también aclaró que la aprobación del proyecto no significa una reducción de los días festivos que hoy existen en Chile: “El beneficio que estamos legislando, para reducir la jornada laboral de 45 a 40 horas, no tiene nada que ver con los feriados legales que ahora existen”.