El crecimiento económico se contrajo más de lo esperado en el primer trimestre, según la última revisión del PIB trimestral que fue publicada este miércoles. Esto tras haber crecido con fuerza en el último trimestre del año pasado.
La economía estadounidense se contrajo un 1,6% entre enero y marzo de este año, y fue mayor al 1,5% de la revisión anterior y a lo esperado por los analistas. La cifra llega en medio de temores de recesión global, y tras una nueva subida de tasas de interés por parte de la Fed, para frenar las presiones inflacionarias en la principal economía del mundo.
El mercado proyectaba una contracción de 1,5% para los primeros tres meses del año. El dato se explica en parte por un menor ritmo de acumulación de inventarios por parte de las empresas, escasez de trabajadores y problemas en la cadena de suministro.
El gasto público, las exportaciones y la inversión privada también decrecieron a comienzos de este año, según los datos entregados por el gobierno de Estados Unidos. Por otro lado, el consumo privado y las importaciones aumentaron entre enero y marzo.
Una de las principales preocupaciones es la elevada inflación en EEUU, que está en su mayor nivel en 4 décadas y llevó a la Fed a subir las tasas de interés en su última reunión. Se prevé que el organismo continuará impulsando las tasas para contener las presiones en los próximos meses.
Para hoy además, se espera un nuevo discurso del presidente de la Fed, Jerome Powell.
