El presidente Sebastián Piñera, en el marco del inicio del pago de subsidio al ingreso mínimo garantizado, dijo que la ayuda si bien no es suficiente, es un aporte para los trabajadores en medio de la crisis económica que vive el país producto de la pandemia. La medida beneficiaría a cerca de 700.000 trabajadores, según el gobierno.

“Sabemos que no es suficiente, pero en la vida nada suficiente. Pero sabemos también que es un aporte y una ayuda una más”, dijo el mandatario en La Moneda.

El Ingreso Mínimo Garantizado es un beneficio social que eleva, vía subsidio directo al trabajador, las remuneraciones brutas de aquellos que perciben salarios entre el mínimo vigente ($320.500) hasta los $384.363.

Por su parte, Piñera enmarco la medida en medio del plan de protección social, que incorpora anuncios realizados durante el estallido social y la crisis sanitaria, como el aumento de las pensiones del pilar solidario, el bono Covid-19 y el crédito para las empresas con aval del Estado, entre otras medidas.

El mandatario también destacó el esfuerzo que estaría haciendo por parte del gobierno en aumentar el gasto público y que iría mucho más allá de las medidas que existían antes en materia de protección social. Sin embargo, contextualizó que esta inyección de recursos también se da en medio de una crisis económica.

En esa línea, Piñera apuntó que “no sabemos cuánto va a durar la recesión mundial y por lo tanto, además de la sensibilidad y urgencia, tenemos que actuar con un sentido de responsabilidad. Debemos tener también resistencia para que esta red de protección social se mantenga durante el tiempo en que los chilenos y las chilenas la necesita”.