Presidente de Clínicas de Chile también afirma que sería una locura dejar caer al sistema de isapres

En medio de la crisis financiera que afecta a las isapres, el presidente de Clínicas de Chile, Gonzalo Grebe, se sumó a las declaraciones dadas ayer por el Superintendente de Salud , Vítctor Torres, y también afirmó que no se puede dejar que el sistema de las isapres colapse.

“Efectivamente coincidimos en que sería una locura dejar caer el sistema porque las implicancias que hay de la caída del sistema asegurador privado sobre los pacientes, sobre los prestadores es tremenda y claro, en la medida que efectivamene se produzcan propuestas concretas de cómo se va a resolver el problema, la verdad es que ahí nosotros, realmente, vamos a estar un poco más tranquilos”, dijo en entrevista con T13 Radio.

Grebe enfatizó que este un tema integral y en específico sobre el impacto que podría tener en las clínicas una quiebra de las isapres indicó que “las clínicas más débiles, en la medida que no puedan en el corto plazo recuperar parte importante del capital que se les adeuda, efectivamente van a enfrentar una crisis de liquidez que puede terminar con la caída de algunos prestadores y eso es lo más grave, es gravísimo”.

La situación de las isapres se agudizó tras el fallo el fallo que dictó el 30 de noviembre la Corte Suprema, el que ordena aplicar la nueva tabla de factores a todos los afiliados y restituir los cobros en exceso y cuya implementación le corresponde a la Superintendencia de Salud, para lo cual deben revisar 42 mil planes que tienen 995 tablas vigentes.

En cuanto a la definición que debe tener el organismo gubernamental Grebe dijo que “llevamos mucho tiempo de incertifumbre e incerteza, acá se necesitan soluciones ahora, y esto ya esta llegando a los pacientes por la caída en los convenios con las isapres”.

En cuanto a la deuda que mantienen las isapres con las clínicas precisó que “el nivel de endeudamiento con el cual hoy está funcionado el sistema es gigantesco, desde marzo a noviembre la deuda ha aumentado un 80%, de $300 mil millones a $560 mil millones, en los últimos 90 días alcanza casi los $100 mil millones”.

Explicó que ante el término de los convenios son los pacientes los que deben pedir sus reembolsos, lo que implica que el prestador recupera el dinero más rápido, pero a que eso genera un desincentivo para el paciente de seguir en el sistema privado.

En cuanto al impacto que tendría el traspaso de los usuarios del sistema público de salud a las clínicas indicó que “las clínicas no solo atienden pacientes isapres, prácticamente el 50% de los pacientes que nosotros atendemos son del sistema público e, insisto, que lo que nosotros necesitamos es que el sistema de financiamiento, la forma en que las personas acceden a la prestación que nosotros damos, tenga un sistema de financiamiento sustentable, sea público, privado o mixto o sea el que sea. A nosotros nos gusta el sistema mixto porque eso de alguna forma asegura la libertad de elección de las personas”.

Agregó que de momento no existe un plan claro, dado que la propuesta de Nueva Constitución establecía un fondo público de salud, lo que ya no está vigente.

Por ello enfatizó que se debe dar una viabilidad de mediano plazo a la industria, ya que, de no existir una solución permanente, si todos los pacientes del sistema privado de salud pasaran al público, que ya está colapsado, se generaría un problema sanitario.