La mejora de los ingresos de los chilenos empieza a convertirse en prioridad en el debate económico. Y justo cuando se discute la reforma de pensiones, y luego de meses de controversia por el retiro de los fondos de pensiones, ahora parece que empieza a ganar fuerza el denominado Ingreso mínimo garantizado.
Lo planteó ayer de manera inesperada el mismísimo presidente de la Confederación de la Producción y del Comercio (CPC), Juan Sutil, en el marco de su participación en la Enade 2021.
“Quizás es el momento de discutir un ingreso mínimo garantizado, que sea progresivo y sustituya otras ayudas del Estado que no siempre llegan a las personas y logran la debida efectividad. Las personas quieren un piso desde el cual puedan desplegarse, aunque eso implique una mayor responsabilidad”, afirmó.
Y esas declaraciones encontraron buena acogida en el gobierno, particularmente en la figura del ministro de Hacienda, Ignacio Briones.
“Me parece bien, me parece bien porque, de hecho, es en lo que Chile ha estado avanzando. Esto no es algo nuevo”, dijo el titular de Teatinos 120, en conversación con radio Universo.
En esa línea, recordó que la actual administración implementó un ingreso mínimo garantizado que aporta aproximadamente $ 50 mil al salario mínimo y permite “al final del día un ingreso mayor”.
“Acá está la idea. Esta avanzada. Es una idea que Chile ha venido implementándola. No es nueva pero creo que la novedad es que el presidente de los empresarios esté en esa idea, apoye esta idea, que sigamos ampliando ese camino. Y ese camino para ampliarlo va a necesitar más recursos”, precisó.
No obstante, advirtió que debe ser un instrumento para incentivar el trabajo, particularmente el trabajo formal. Briones dijo en ese sentido que la economía chilena sufre de informalidad laboral, la cual se va a acentuar tras la pandemia.
El jefe de la billetera fiscal recordó que la media de los sueldos en Chile es unos $ 500 mil (percentil 50) y que en las empresas más grandes los salarios son más altos que en las pequeñas, porque en las grandes se concentran los trabajos formales.
Por lo mismo advirtió lo importante que es el diseño de esa política.
Dijo que los sueldos suben en la medida que la economía crece y por eso, reiteró, es que el crecimiento es importante. “No se puede pretender aumentar por ley, multiplicar por dos, por tres, por ley un sueldo si la realidad no conversa con la realidad económica de un país”, afirmó.