Este miércoles podría ser despachado del Congreso el proyecto de ley Fintech. La sala de la Cámara de Diputados votará la iniciativa, la cual ya se encuentra en su tercer trámite, por lo que en caso de ser aprobada, queda lista para su promulgación.

Antes de dicha votación, los diputados de la comisión de Constitución debatieron este martes por última vez sobre el asunto. Allí, uno de los temas que más álgidos fue la inquietud sobre cómo conversa este proyecto con la protección de datos personales, en momentos en que la iniciativa que busca crear una agencia que proteja dichos datos lleva varios años siendo discutida en el Parlamento, pero aún no ve la luz.

El ministro de Hacienda, Mario Marcel, respondió algunas de esas interrogantes. Por ejemplo, comentó que en los temas de gobernanza, “este proyecto le asigna un conjunto de funciones a la CMF, eso es sin perjuicio de las atribuciones de carácter mas general y más global que tenga la agencia de protección de datos personales”.

También comentó que el Sistema de Finanzas Abiertas que crea este proyecto, permite compartir cierto tipo de información, pero no todos los detalles. Así por ejemplo, indicó que “la información que se va a usar es la de carácter financiero, y esa la define el mismo proyecto. Señala en el artículo 17 que el sistema de finanzas abiertas incluye, primero, la información sobre términos y condiciones generales de los productos y servicios financieros que ofrezcan al público y canales de atención. En segundo lugar, información de identificación y registro de los clientes y sus representantes recabada por las instituciones proveedoras”.

Como tercer punto, mencionó el artículo que apunta a “información sobre las condiciones comerciales contratadas y el uso o historial de transacciones realizadas por los clientes respecto de los productos y servicios financieros que mantengan contratados con instituciones proveedoras de información, según sea aplicable, incluyendo: a) cuentas corrientes y sus líneas de crédito asociadas, cuentas a la vista, cuentas de provisión de fondos y cuentas de ahorro; b) tarjetas de crédito, con sus respectivas líneas de crédito asociadas; c) operaciones de crédito de dinero; d) pólizas de seguro; e) instrumentos de ahorro o inversión; f) servicios de operación de tarjetas y medios de pago similares, y g) otros productos o servicios financieros que defina la Comisión por norma de carácter general”.

Y acá Marcel quiso detenerse y aclarar algunas dudas respecto de si la información que se compartirá entre la banca, el retail financiero y las fintechs incluirá o no el detalle de cada transacción que hacen las personas, o es más bien información más general. “Enfatizo que en el encabezado, de lo que se habla, es del historial de transacciones realizadas por los clientes respecto de productos y servicios financieros, es decir, no se refiere a las transacciones que se hayan hecho con una tarjeta de crédito. (Más bien) se refiere al hecho de haber contratado una tarjeta de crédito, de haber cerrado una tarjeta de crédito. Se refiere, en el fondo, al uso de los servicios, pero no en particular a las transacciones específicas que se haga con ellos”, comprometió el ministro de Hacienda.

Además, destacó que el proyecto ahora contempla que “la información e historial de transacciones realizadas no podrá tener una antigüedad superior a 5 años”. Y recordó que ese límite se agregó en el Senado, ya que anteriormente no estaba considerado un límite de tiempo.