Tras sondear varios nombres, finalmente el presidente electo de EEUU, Donald Trump, se inclinó por el multimillonario gestor de fondos, Scott Bessent, para asumir como secretario del Tesoro en EEUU, quien dará prioridad al cumplimiento de las promesas económicas de quien llegará a la Casa Blanca a partir de enero de 2025, tras haber obtenido la mayoría en ambas cámaras.

Bessent tiene 62 años. Estudió ciencias políticas en la Universidad de Yale, y es el hijo mayor de un agente inmobiliario. En 1991 se transformó en gestor de la fortuna del magnate George Soros, pero en el año 2000 abandonó la firma para montar su propio fondo de inversiones. En su vida laboral se ha dedicado principalmente a invertir y administrar fondos.

“Es muy conservador, pero bien moderado a la hora de hacer cambios radicales. La baja del dólar se debe más bien a que iba a optar por un candidato que fortaleciera una política de gasto expansiva y eso robusteciera el dólar. La estrategia de Bessent va a ser más bien controlar el gasto público, reducir el gasto fiscal, y mucho control sobre los ítem del gasto público. Creo que está llamado a hacer un equilibrio financiero”, sostuvo a Pulso, Cristián Cerna, socio director de Alta Dirección.

Está casado con el exfiscal de Nueva York, John Freeman, con quien tiene dos hijos.

En 2015 fundó la firma de inversiones, Key Square Group, y durante este año organizó una recaudación de fondos en favor de la campaña de Donald Trump, quien se quedó con la mayoría de los votos electorales y con el voto popular, en las elecciones del 5 de noviembre, cuando enfrentó en las urnas a la vicepresidenta de EEUU, Kamala Harris.

“Me complace nombrar a Scott Bessent como 79º secretario del Tesoro de los Estados Unidos. Scott es ampliamente respetado como uno de los principales inversores internacionales y estrategas geopolíticos y económicos del mundo. La historia de Scott es la del sueño americano”, dijo el Mandatario electo en la red social Truth la semana pasada.

Si Bessent obtiene el visto bueno por parte del Senado, pasará a ser el dirigente económico de mayor rango de Estados Unidos, responsable del mantenimiento de la mayor economía del mundo, desde la recaudación de impuestos y el pago de las facturas del país hasta la gestión del mercado de deuda del Tesoro, valorado en 28,6 billones de dólares, y la supervisión de la regulación financiera.

Asimismo, dará prioridad al cumplimiento de las promesas electorales de reducción de impuestos, dijo al Wall Street Journal en una entrevista publicada este domingo.

En la instancia recalcó que las medidas de recorte fiscal incluirían hacer permanentes los recortes de impuestos del primer mandato de Trump, así como eliminar los impuestos sobre las propinas, las prestaciones de la seguridad social y el pago de horas extraordinarias.

Bessent también se centraría en promulgar aranceles, recortar el gasto y mantener el estatus del dólar como moneda de reserva mundial, dijo al periódico en la entrevista. Bessent, que ha sido donante, asesor económico e impulsor en televisión de Trump, fue nombrado secretario del Tesoro estadounidense por Trump la semana pasada.

El jefe del Tesoro también dirige la política de sanciones financieras de Estados Unidos, tiene influencia sobre el Fondo Monetario Internacional, el Banco Mundial y otras instituciones financieras internacionales dirigidas por Estados Unidos y gestiona los controles de seguridad nacional de las inversiones extranjeras en Estados Unidos.