El retiro programado fue la modalidad favorita de los jubilados en el segundo semestre de 2019. Tanto que registró su mejor semestre desde 2011 (ver gráfico), ya que se entregaron 11.139 retiros programados entre junio y diciembre del año pasado, lo que significa un 47,6% del total de las elecciones. Así lo revela el informe de selección de modalidad de pensión del segundo semestre de 2019, realizado por la Superintendencia de Pensiones, y que pone foco en el Sistema de Consultas y Ofertas de Montos de Pensión (SCOMP).

“El aumento de los retiros programados en el segundo semestre 2019 se debe a la disminución en las tasas de ventas implícitas de rentas vitalicias ofrecidas por las compañías de seguros y su pérdida de competitividad frente a las tasas de retiro programado”, explica el documento.

Y esa tendencia que mostraron las aseguradoras durante el segundo semestre del año pasado, se ha mantenido hasta ahora e incluso se ha acentuado. Es más, en tiempos de coronavirus, los expertos aseguran que la mejor opción es optar por un retiro programado, por lo que esta modalidad incluso podría volverse más popular este año.

“Hoy solo se sugiere optar por la modalidad de retiro programado, ya que todos los fondos han perdido valor, por lo tanto, sabemos que después de esta pandemia los mercados van a empezar a reactivarse y a recuperar parte del menor valor obtenido”, comenta María Eugenia Jiménez, directora ejecutiva de la consultora previsional Brain Invest.

Hay que considerar que cuando una persona opta por retiro programado, su dinero sigue rentando en la AFP, por lo que si se espera la recuperación de los mercados, puede lograr un mayor monto acumulado y luego ver la opción de ir por una renta vitalicia, en caso de que mejoren las condiciones.

Agrega la experta que ”la opción de renta vitalicia solo se sugiere a determinadas personas, porque las tasas que ofrecen, es decir, el monto de pensión que están ofreciendo, es considerablemente más bajo de lo que se ofrecía anteriormente. Por lo tanto, hay que esperar que las ofertas que hacen las aseguradoras aumenten, y eso probablemente no va a ser antes del próximo año”.

Con todo, es normal que aumente la preferencia por el retiro programado luego de períodos de grandes caídas en los mercados, pues ello afecta las tasas de que ofrecen las rentas vitalicias. El informe de la Superintendencia de Pensiones dice que “las fluctuaciones que se produjeron luego de la crisis financiera del 2008 y que se mantuvieron hasta el segundo semestre de 2010, fueron producto de la caída de los fondos y posteriores correcciones en las expectativas de rentabilidad, lo que afectó la elección de modalidad seleccionando preferentemente la modalidad de retiro programado (el segundo semestre del año 2010 las preferencias por retiro programado alcanzaron el 63% del total de pensionados de la época).

Posteriormente, comenzó a tomar importancia en las preferencias de los pensionados la modalidad renta temporal con renta vitalicia diferida, con aumentos sostenidos desde el primer semestre de 2011, logrando mantenerse en niveles sobre el 30% desde el segundo semestre de 2014.

Por otro lado, el informe del regulador revela que el 66,1% de los pensionados en rentas vitalicias en 2019 aceptaron su pensión por parte de una oferta externa, y un 33,9% correspondieron a ofertas internas, pero el porcentaje de nuevos pensionados que seleccionaron una oferta externa baja de 74,2% a 53,7% desde el primer al segundo semestre de 2019.

¿Por qué ocurrió eso? “La disminución en las tasas de ventas implícitas en las ofertas de rentas vitalicias y su pérdida de competitividad frente al retiro programado, causó que varias aseguradoras del mercado optaran por realizar su mejor oferta en las ofertas internas, sin mejorar éstas mediante una oferta externa”, dice el informe.P