Lucía Santa Cruz, consejera emérita de LyD
— “Tuve el privilegio de trabajar con Rosanna Costa en Libertad y Desarrollo por muchos años. Rosanna, a mi juicio, es una mujer de un rigor profesional sin límites, gran honestidad intelectual e integridad personal a toda prueba. Mujer de convicciones fuertes, jamás la he visto acomodar sus conocimientos o la evidencia dura por ningún fin que no sea la búsqueda de la verdad.
Rosanna ha tenido una extensa experiencia como economista, académica, y ha participado en muy variados sectores, en temas de presupuesto, productividad, política fiscal, laboral, modernización del Estado, mercado de capitales, entre otras. Rosanna ha mostrado siempre una gran generosidad en su disposición permanente para cooperar allí donde se la ha demandado, integrando diversas comisiones asesoras presidenciales bajo los más distintos gobiernos con gran entrega y siempre pensando por sobre todo en el bien de Chile”.
Bernardita Piedrabuena, comisionada de la CMF
— “Felicito a Rosanna por este merecido reconocimiento a su destacada trayectoria profesional. He visto cómo su vida laboral la ha dedicado a las políticas públicas y he tenido la suerte de interactuar o trabajar con ella en varias oportunidades. En cada una de ellas he podido constatar, en primera persona, sus cualidades. Primero, como economista, donde destaco su capacidad analítica. Segundo, como profesional, observando un alto grado de dedicación y compromiso con su trabajo y lealtad con las instituciones de las que forma parte, buscando la sobriedad y no la sobreexposición a las luces ni las cámaras. Y, por último, su calidad humana, su búsqueda por el diálogo, su capacidad de empatía y su paciencia.
Creo que siendo mujer no es fácil transitar en la vida laboral por la macroeconomía y las finanzas. Para mí, Rosanna es un ejemplo de mujer que ha confiado en sus capacidades y ha perseguido su proyecto de vida, sin que ello haya significado abandonar su identidad de mujer. Por ello, me alegra el reconocimiento que hoy se le da”.
Paula Benavides, consejera del Consejo Fiscal Autónomo
—”Pude conocerla como directora de Presupuestos y la considero una gran economista, con un amplio conocimiento en materias fiscales, macroeconómicas y en políticas públicas, además de una enorme capacidad de trabajo. Pude ver también a alguien que ejerce la profesión con visión de Estado, pasión y esmero, y ese tipo de liderazgos son realmente valiosos, más allá de las legítimas diferencias de mirada que se puedan tener”.
Susana Jiménez, exministra de Energía
— “Cuando conocí a Rosanna Costa, ella ya era una economista muy reputada. Desde Libertad y Desarrollo se había dado a conocer como experta en materias laborales y fiscales y su opinión era muy respetada. Vinimos a conocernos más de cerca después de su paso por la Dipres, cuando regresó como subdirectora a Libertad y Desarrollo. Ahí confirmé lo que ya sabía de ella: una mujer muy inteligente, trabajadora, meticulosa y comprometida. Fue muy importante su influencia para hacernos sentir la importancia de incidir, con buenos fundamentos, en la política pública del país.
Pero además de una gran profesional, Rosanna es una persona que genera vínculos y amistad con quienes la rodean. Es muy cariñosa, cercana y preocupada por los demás.
No me cabe duda que es hoy la mujer más influyente, pues gracias a su esfuerzo y trabajo ha logrado alcanzar importantísimos cargos desde donde ha contribuido al desarrollo de nuestro país”.
Andrea Tokman, economista jefe de Quiñenco
— “Rosanna ha sido una inspiración para muchas personas, me incluyo en esa lista. Tiene una sólida base técnica que ha puesto a disposición de nuestro país, con una humildad y humanidad que cuesta encontrar en estos días. Si bien tiene clarísima su inclinación política, eso no le ha impedido ejercer su rol de forma responsable y dialogante. Ha orientado su tremenda capacidad a contribuir al progreso del país desde importantísimos cargos de responsabilidad, donde la representación femenina ha estado bastante ausente. Creo que su huella ayudará a las siguientes generaciones de mujeres economistas a atreverse.
Ha incidido en las políticas públicas desde sus asesorías al poder legislativo, en el control clave de las finanzas públicas, encabezando la Dirección de Presupuestos y, estos últimos años, en una destacada labor dentro del Banco Central, en el resguardo de la estabilidad financiera en un período extremadamente desafiante. En un Banco Central que ha estado a la altura del desafío político y económico que enfrentamos, no solo con un manejo de sus herramientas de política y análisis de excelencia, sino que saliendo de su zona de confort con la convicción de que la institucionalidad monetaria actual puede y debe tener una relación más cercana con la ciudadanía y la política, para poder seguir aportando a la estabilidad y progreso del país. La mejor forma de resguardar su autonomía y eficacia se basa en este acto de equilibrio delicado de acercamiento que genera mejor conocimiento, pero también mayor exposición, a la cual ella y el resto del consejo del banco han respondido de forma ejemplar”.