Este viernes se llevó a cabo la Junta de accionistas de SAAM, donde se aprobó un millonario dividendo definitivo, y además se trazaron los objetivos para la nueva etapa de la compañía. Asimismo se eligió al nuevo directorio de la empresa.
El dividendo definitivo aprobado es por US$ 125 millones que, sumado al provisorio distribuido en enero pasado, totaliza US$ 250 millones, el mayor en la historia de SAAM.
“SAAM mantiene sólidos indicadores de solvencia y liquidez y goza de una estructura de capital robusta para enfrentar este nuevo ciclo, en el que tenemos un objetivo claro: convertirnos en un operador global líder en el negocio de remolcadores y líder regional en logística aeroportuaria. Ya somos referentes en ambos negocios y hemos desarrollado un modelo único de operación, que ha tenido positivos resultados”, dijo el presidente de SAAM, Óscar Hasbún.
Y agregó que “SAAM seguirá buscando oportunidades de crecimiento más allá de las fronteras en que operamos, dando continuidad al rol de consolidadores que hemos desempeñado hasta la fecha”.
La empresa proyecta inversiones por US$110 millones para 2024.
Hasbún también recordó las fusiones y adquisiciones que ha hecho la empresa en los últimos cinco años. Además, destacó los avances en materia ambiental, uno de los grandes desafíos de la industria. De esta forma valoró la incorporación de los dos primeros remolcadores eléctricos a la flota.
En la junta de accionistas además se eligió al nuevo directorio de la empresa que quedó conformado por Óscar Hasbún, JeanPaul Luksic, Francisco Pérez Mackenna, Pablo Granifo, Francisco Gutiérrez y por los directores independientes Jorge Gutiérrez y Rafael Fernández.
